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324 E. Zudaire Huarte ellos y previo pago de un real anual por cada veinte o fracción en que se excedieren 46). Los múltiples y reiterados conflictos del monasterio con sus sola– riegos se fueron solventando con dispendios innegables, pero sin perder una pulgada de su dominio predial. No tuvo la misma fortuna, sin duda porque no era tan evidente su derecho, en los encuentros con los baztaneses. Desde que en 1482 se reconoció al abad y convento de Urdax la condición jurídica de cualquier otro vecino del valle, en el aprove– chamiento de leña y pastos, no solamente reactivó la fundición y labra del hierro en su << ferrería>>, sino que promovió una intensa explotación pecuaria. Llegó a organizar tres grandes bustos o vacadas, en las que apenas dos docenas de reses eran del monasterio 46 ). Aquellos bustos de Animelia, Michelia y Gorrelia se formaban con ganado ajerizado, es decir, de tierras extrañas, como la de Labort y de Vascos, en Francia, y las de Valdu elzama, Roncesvalles y Velate, singular– mente en invierno; a ellos se acogían también las reses de los borde– antes y en tiempo de guerra las de muchos baztaneses, << por tener el monasterio salvaguardia con los franceses>>. No menos de 135 seles o majadas, la mayor parte en los comunes de Baztán, les servían de acostadero. Ningún otro ganado podía pasar la noche en ellos. Aquel empuje agropecuario, con la consiguiente expansión territorial, provoc6 muchas contiendas. Si el intrépido canónigo fray Pes, con su com– pañero fray Martín de Labandívar y varios criados del convento, apresaban reses baztanesas sorprendidas de noche en los cubillares reservados y exigían rescate por ellas o las carnereaban para la pitanza conventual, replicaban los jurados y guardas del valle, deses– perados quizá porque en los tribunales de Navarra no prosperaban sus querellas, con secuestros de reses monásticas o de sus bustos aun dentro del llamado << término redondo>>, propio del monasterio. Fatigados de pleitos y contiendas, acordaron unos y otros someter sus reclamaciones a una comisión de arbitraje. El ilustre abad de 45 ) AHN, Cons. 6927, doc. n. 6. Contratos, flo, 251. Por traslado, Pamplona, 2 de octubre de 1777. 46 ) << Las cabalgaduras que el dicho convento tiene son tres machos, un rocín, una yegua, una potranca, dos borricos, tres yuntas de beuyes, y hasta dos docenas de vacas. Estas se sutentan fuera del convento lo más del tiempo en los monstes ». Declaraciones del testigo Martín de Echeverría, natural y habitante del lugar de Azpiloueta, de la casa de Arraztoa, con referencia al interrogatorio del procurador Aurquía. AHN, Cons. 6928 : Cnt. Urdax, faxo 14 ..., fol. 27v.