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82 E. Zudaire Huarte Con el nuevo abad, Joaquín Arbeloa, elegido «en esta Iglesia de Sn. Ignacio de Loyola» el 12 de septiembre de 1801, se registran nuevos nombres, que no indican nuevas incorporaciones de personal, sino nueva distribución de oficios: prior, el P. Bartolomé Jusué, ex abad, nat. de Elgóibar; bibliotecario el P. Juan Ezpuru, nat. de Bilbao; cercador, el P.Pr. José Irigoyen, nat. de Vera de Bidasoa. El 2 de mayo de 1803 profesa, con h'ábito de coro, el Hno. Juan Bautista Olea, nat. de Bolívar (Vizcaya); y el 12 de septiembre viste la misma librea, previo examen de Gramática, Pedro Julián de Duñabeitia, nat. de Elorrio; profesará el I O de octubre de 1804, también en Loyola, ante Agustín de Sanzberro, promovido al abadiato el 3 de junio de dicho año. En la distribución de oficios, despensero «y por ahora también hospedero», el P. Francisco Ignacio Arrieta, nat. de Elorrio. En el santuario de Loyola visten hábito de coro de la congregación norbertina el Hno. Pedro Felipe de Elizalde, nat. de Garzáin, que profesa en mayo de 1806; y el Hno. Juan Bautista de Landeta, nat. de Arteaga, señorío de Vizcaya, que pronunciará sus votos religiosos en el monaste– rio de Urdax, el 13 de octubre de 1807. De las vesticiones reseñadas se desprende que comenzaba a sentirse en los pueblos aledaños la irradiación vocacional de los refugiados de Urdax. Vicaria de Urdax «Sanzberro, después de la emigración, volvió el 9 o 1 O de Julio de 1795 a esta parroquia»; firmó partidas de bautismo desde 26 de abril de 1798 a 30 de mayo de 1804; faltan las anteriores, lo mismo que las de los franceses bautizados desde 28 de octubre de 1798 hasta el año 1802, en que se publicó el concordato de Pío VII con Napoleón Bonaparte 22 ). El domingo, 22 de noviembre de 1801, al tiempo .del ofertorio de la misa popular, leyó Sanzberro el monítorio del sañor abad, Joaquín de Arbeloa, y su primera carta, vertida al idioma vascongado; y reiteró la lectura de dicho monitorio el día 29, que completó con una segunda carta conminatoria «en lengua bascongada, de que doy fee». Al vecino Juan Bautista de Estebecorena habían hurtado dos vacas de yunta. El abad Arbeloa fulmina pena de excomunión al cuatrero que no las devuelva en término de seis días: « Maldito sea el manjar que comieres, la bebida que bebieres y el aire que respiráderes. Maldita sea la tierra que pisáredes y la 22 ) José Matías de Elizalde, en acotación a los «Libros parroquiales»: AP. Urdax.

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