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80 E. Zudaire Huarte marzo era abad de San Joaquín, al hacerse cargo en Madrid del «tesoro de Loyola» y de su traslado al santuario ignaciano. El ayuntamiento de la villa de Azpeitia acordó «celebrar una función solemne en acción de gracias a ambas Magestades, Divina y humana, por el beneficio grande que se habían dignado de favorecer a esta N. Villa en el destino de la Santa Casa y Colegio de Loyola, destinado por ahora a los Canónigos Premonstratenses del Monasterio de Urdax, en el Reyno de Navarra, para que con su Religiosidad y zelo tenga este Ille. solar del Patrono Nro. Sn. Ignacio de Loiola, héroe grande de la Religión Cathólica, el culto y veneración que se merece tan Ille. Santuario». Nombran por sus diputados a D. Luis de Altuna y al Sr. D. Ignacio Miguel de Agote, los cuales presentan el acuerdo municipal al cabildo eclesiástico, reunido en la sacristía parroquial azpeitiana de San Sebastián de Soreasu. El clero, en vez de acoger con aplausos aquella iniciativa de la autoridad civil, se atornilla con el rector de la iglesia matriz, D. Ignacio Nicolás de Odriozola, que había apelado al M.I. Ayuntamiento en defensa de sus derechos: aquellos premostes, alojados en solar de su jurisdicción, ni le habían comunicado, antes ni después, su toma de posesión, ni le habían mostrado la real cédula de su traslado, aunque otra cosa hubiera prometido su señor abad. No era pequeño el desengaño sufrido, porque, tras informes tan favorables de los fiscales reales, «lexos de corresponder a aquellos anuncios, nos manifiestan tal vez un semblan– te muy distinto» 18 ). Siente preocupación el cabildo eclesiástico por el recibimiento que les dispensará la comunidad norbertina, cuando se celebre la proyectada función, porque no están dispuestos a perder ninguno de sus derechos ni preeminencias. Se aproxima entre tanto la fiesta de San Ignacio. La comisión mixta, que preside el rector Odriozola, está determinada a observar el ceremo– nial de costumbre 19 ). Los regidores de la villa renuncian a las vanas discusiones y nombran comisionados que ventilen directamente con el abad Enseña el programa tradicional. Los señores Francisco de Emparan, Ignacio de Ibero y José Antonio de Altube le informan que los padres jesuítas solían dejar libre, 18 ) Ignacio Odriozola, rector de la iglesia matriz de Azpeitia al M.l. Ayuntamiento; Azpeitia, 14 y 16 de mayo de 1798: Archivo Histórico de Loyola (AHL). Mi gratitud sincera a su culto director, P. José Ramón Eguillor. 19 ) Rector Odriozola al M.l.A.; Azpeitia, 12 de junio 1798: AHL.