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[31] LOS REYES CATÓLICOS RUBRlOAN LA CONCORDIA. DE AZCO!TIA 1189 municipal. Del documento que el escribano Juan Martínez de Arangutia leyó ante el alcalde Juan Sánchez de Zubieta se cer– tifica únicamente que dichas Ordenanzas estaban signadas de escribano público, en tanto que la carta partida de 1413, revi– sada en la misma sesión, estaba signada de escribano público y sellada con sello de cera bermeja, sin duda el de la real chan– cillería. ¿Por qué, sin embargo, apenas si de las Ordenanzas se da el título y fecha, en tanto que de la carta de concordia 3e incluye desde el protocolo al escatocolo? Hecha a los soberanos la presentación de ambos documentos y la súplica correspondiente, accedieron gustosos a la demanda, "por fazer bien e merced a la dicha villa de Azcoytia y a sus casas y caserías y pertenencias de fuera de ella". Y mandaron que se guardaran en todo y por todo, según su contenido, sin tacha ni enmienda, según que más cumplidamente les valió y fue guardado hasta el presente. Y ordenaron en la forma más solemne que se observase esta su carta de confirmación ''so pena de la nuestra merced y de diez mill maravedises a cada uno de vos por quien fincare de lo assy fazer e complir... al príncipe don Juan nuestro caro et muy amado fijo e a los ynfantes, du– ques, condes, perlados, marqueses et ricoshomes, maestres de las hordenes, priores, comendadores et subcomendadores, alcaydes de los castillos et casas fuertes et llanas e a los del nuestro Consejo e alcaldes e alguaziles de nuestra casa e corte e can– celleria... ". Y mandaron asimismo que del pergamino de cuero en que va escrita dicha carta de confirmación se colgara el sello real "de cera colorada ... o de plomo, en filos de seda a colores que vos más quisierdes". No se conserva ni la huella de dic:::io sello. "Dada en la muy noble ciutat de cordoua a veynte e quatro días del mes de mar<;;o, año del nascimiento de nuestro señor Ih. Xpo. de mill e quatro cientos e ochenta y cinco años. Yo el Rey. Yo la Reyna". Sin presunción y casi con rubor he de manifestar no sola– mente que por primera vez se publica la carta de concordia de la villa de Azcoitia y su ratificación por los Reyes Católicos, sino que ésta es la primera noticia que de ambos diplomas trasciende a la historiografía guipuzcoana.

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