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115] LOS REYES CATÓLICOS RCJBRICAN LA CONCORDlA l>E AZCtJJTIA 373 Valda, señor de Valda, "vasallos de nuestro señor el rey". Y con ellos, los linajes de Loyola, Zumaya, Zarauz, Garibay, Guevc.ra, Arteaga, Amésqueta, Cegama y los vizcaínos de Múxica-Butrón y Urquizu 26 • Se lanzó el reto no a las villas por su nombre, sino por el de sus vecinos más relevantes, aunque se añadi2ra a veces el de "todos los moradores de dentro y fuera de la cerca y el de vuestros paniaguados": "a vos el bachiller Juan Martí– nez de Olano e Juan de Olano, su hijo, e Martín Martínez de Aramburu vecinos de la villa de Miranda de Iraurgui, llamados cofrades de Santa Cruz.; e a vos los bachilleres Juan Pérez de Vicuña e Martín Sánchez de Astigarribia e Pedro Ibayñes de Otalora e a todos los otros vecinos e moradores dentro de los muros e cerca de la villa de Salvatierra de Yraurgui (Azpeitia) que sodes y estades en posesión de homes hijosdalgo"; y a dos o tres vecinos de Monreal de Deva, de Motrico, de Tolosa y sus moradores (salvo el linaje de :Zaldivia), y de Guetaria, y de Villafranca y de Segura ("salvo el Maestre de Campo Lope Mar– tínez de Olaverría, vasallo del Rey nuestro señor") "e a cada uno e cualquier de vos". Dieron como razón de aquel desafío "haber hecho hermandad o ligi'ls e monipodios contra ellos e haberles hecho derribar sus casas fuertes... haber procurado deshacerles e quitar sus nombres de la tierra e queridoles quitar sus anteiglesias e monE:sterios e otras muchas causas". Se les desafiaba en nombre de todos los parientes, aliados y adheren– tes, a una guerra sin cuartel y se les requería a proveerse "de vuestras armas e de todas las otras cosas que vos conven:::-án e cumplirán e menester hobiéredes para vuestra defensión, den– tro del término de la ley" 27 • ¿Una nueva jacquerie? ¿Cómo explicar la singularización de esas ocho villas? ¿Por su importancia? No lo eran menos San Sebastián, Mondragón y Fuenterrabía. ¿Por cabezas de Her- 26 E. GARIBAY destaca este he,cho de la "liga y confederación" que los parientes mayores de Guipúzcoa anudaron con -los oñacinos y gam– boínos de Vizcaya, "en especial con Juan Alonso de Muxica, que era el más poderoso -oñacino- de este señorío". Ilustraciones, p. 41. 21 JUAN MARTÍNEz DE ZALDIV'IA, Su.ma de las cosas cantábricas y gití– puzcoanas, cap. XXIII. Edición, con Introducción y Notas, por Fai.:.sto AROCENA. San Sebastián, 19'45, pp. 9·1-96. GARIBAY, Esteban. Ilustrar:ío– nes, pp. 41-45.
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