BCCCAP00000000000000000001079

:BótETÍN i>E HISTólúA Y AN"TIGÜEDADJliS· 287 ciudad de Mompox (8); y otras en que su conciencia, nunca fundida en el oro de las contadurías, habrá de condenar a al– gunos de los que con él bogaban por la quebradiza burocracia indiana. Tampoco perderá la oportunidad de defenderlos cuan– do se le presente. El 1 Q de mayo de 1756 se le cursó, por secretaría de cáma– ra, en nombre del virrey Solís, un oficio del oidor fiscal, por el que se le encomendaba proceder a la averiguación de ciertos hechos que, denunciados por el presidente de Quito, le obliga– ron a la pesquisa y sumaria correspondiente contra el •Corregi– dor de Guayaquil, don Manuel Fernández de Avilés (9). Labor ingrata, pero allanada por la especificación de cargos que se formulaban en los capítulos 6, 8, 10 y 11 de la denuncia. Más penosa y de mayores sobresaltos fue, sin que lo sos– pechara el virrey ni lo barruntara Sarratea, la orden por la cual se le nombró, aquel mismo año, de 1756, juez visitador de las reales cajas de Guayaquil. Uno de los contadores, Laynes, había c:onseguido cruzar el Atlántico y presentarse en la metrópoli; el otro, Pedro Félix de Santander, vecino de la villa, se había refugiado en Santa Marta del Puerto, provincia del Chocó y jurisdicción del corre– gidor de Barbacoas. Tras laborioso examen de los libros de da– tas y cargos y del rimero desordenado de comprobantes, co– menzó el juez visitador el libramiento de decretos: "D. JUAN MARTÍN DE SARRATEA y GOYENECHE, Contador Mayor del Tribu– nal y Real Audiencia de Cuentas de la Ciudad de Santa Fe y Juez Visitador e Interventor de estas Reales Caxas y de lbs na– víos y embarcaciones que entran y salen en este puerto, por comisión del Excmo. Sr. Virrey de estos Reynos, en uso de las facultades recibidas, a v. md.. . ordena ... " Y desde Guayaquil y desde Quito se dirige, al teniente de gobernador y justicia mayor de Barbacoas y al mismo gober– nador y comandante general de las provincias del Chocó, don (8) Anbog., Aguardientes de Bolívar, t. IV, fol. 185-199, 20 nov. de 1750 a 26 de abril de 1756. Mercado cIHícil éste del aguardiente, cuando tanto tiempo costó dar con un postor que no levantara suspicacias en los oficiales de real hacienda ni se sintiera defraudado en el arrendamiento. (9) Angob., Miscelánea, t. 136, fol. 465 y Real Hacienda, t. 61, fol. 65.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz