BCCCAP00000000000000000001075
EN TORNO A LA REVOLUCIÓN CATALANA DE 1640 63 con el enemigo de la víspera-(2), hemos de reconocer que el he– cho es al,go extraordinario, y que llenó de asombro. a las Canci– llerías extranjeras. El propio D'Argenson escribía a Richelieu, desde Barcelona, a 4 de junio de 1641, que la rebelión catalana, aunque justificada, se había producido "un peu contre les for– mes" (3). Ni vale invocar, como precedente, la revolución en tiempo de Juan II (1462-1472), aunque a ella se aludiera en docu– mentos oficiosos, y aunque, al rendirse Barcelona en octubre de 1652, se formaran en borrador los cabos y apuntamientos nece– :'arios, según el modelo de los capítulos que se ajustaron en 1472 con el Rey Don Juan (4). La pereza individual y colectiva, que busca la simplificación de loB grandes aconteceres históricos, reduciéndolos a episodios dramáticos con una víctima-individual o colectiva-y un ver– dugo-colectivo o individual-, no ha procedido en nuestro caso de distinta manera. Se ha escogido su "azal?lel" en la persona del Conde Duque de Sanlúcar, y con esta imputación túvose por libre y horra de toda justificación expiatoria. No intentamos, al presente, desbrozar ni aclarar selva tan en– marañada; y hasta fuera excesiva nuestra pretensión si aspirá- (2) A 6 de enero de 1640 rendían los franceses la plaza rosellonesa de Salces al Virrey de Cataluña, Conde de Santa Coloma y al Marqués de los Balabases. Y ya a fines de mayo del mismo año se habían formalizado, se– gún el documentado publicado por P. y Camps en el Memorial Histórico E8pañol, XXI, 416-419, los tratos del Principado con el Rey Cristianísimo, para independizarse de Castilla. Del propio documento se desprende que para el 15 de marzo se habían concertado los preliminares entre Mr. de Spenan, bizarro defensor· de Salces, y Mr. de Plessis de Besangon, por la parte francesa, y los señores Alejo de Sentmenat, Sargento Mayor de Bar– celona; Francisco Vilaplana, Gobernador de las armas del Principado en el Conflent, y don Ramón de Marimón, léase. de Guimerá, por los catalanes. Pierre Vidal, en su Hístoíre de la ville de Perpignwn .. ., París, 1897, pág. 601, fecha asimismo los primeros sondeos oficiales de los catalanes en la Corte francesa, a mediados de marzo de 1640, es decir, dos meses después de la entrega de Salces por el francés. (3) París. Archives... des Affaires Etrangeres. Mé1noíres et Documents, France, vol. 1633 (Languedoc), fol. 434. (4) Parets, Miguel: Orónica..., ap. M. H. E., XXV, 70.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz