BCCCAP00000000000000000001073

26 H. ZUDAIRE HUARTE triunfo no tenía limites. Y añadía, conjurándole con toda su alma por un millón de razones, largas de referir, que procurase llevar a cabo, con la misma fidelidad, las instrucciones que en nombre del Rey le cursaría No– yers.77 Richelieu ansiaba recoger el fruto de la victoria. Era evidente su propósito: hundirnos la espada por el flanco, acentuar las perturbaciones por aquella provincia tan disociada políticamente del resto de la monar– quía. En cartas sucesivas le irá dando consignas sobre la reparación ur· gente de Leucata, sobre el puesto de Agdé, y sobre cuanto juzgare de ne· cesaria estrategia para apoderarse de la villa y castillo de Perpiñán. El ata– que, proyectado para la primavera próxima, se fue aplazando por causas diversas; pero se continuó perfilando el plan, reemplazando mandos y has· ta mudando de objetivo inmediato mientras se fingían sinceras ofertas de paz al Conde Duque. 78 El disgusto por lo de Leucata, que no fue pequeño en Barcelona, «y con razón, porque la pérdida había sido grande, así en el modo como en la sustancia», 79 y los rumores de que se intentaba castigar a los caballeros que hubieran faltado a su obligación, despojándoles de los bienes y mer– cedes qne gozaban de la Corona y agraciando con ellos a los que cum· plieron con su deber, 80 debieron de influir sin duda en la actuación suce– siva del Brazo Militar y de los diputados de la Generalidad, que comenza– ron por manifestar su desazón con sendos memoriales al Rey, cargados de resentimiento, de invectivas contra los ejércitos de naciones, es decir, no catalanes, y de rudos acentos de protesta por lo que unos y otros creye– ron infracción constitucional en la llamada a las armas. 81 17 Richelieu al duque de Halluin; Charonne, 10 de octubre de 1637, en AUBERY, ob. cit., 111, págs. 539-540. 78 Richelieu al mariscal de Schomberg; Ruel, 20 de febrero y 4 de marzo de 1638, en AUBERY, ob. cit., III, págs. 550-551. Otras cartas sobre la misma empresa, id., id., pliginas 700 y siguientes. En una de ellas (pág. 785), le pide «un plan bien particulier et bien fait de la ville et chasteau de Perpignan» y sobre todo, lo necesario para el ataque y expug– nación de la ciudad y su castillo. 19 Garci Gil Manrique, obispo de Barcelona, al secretario Juan Lorenzo Villanueva; Barcelona, 10 de octubre de 1637. A. C. A., Cons 0 jo de Aragón, 281, 59. 81 Consulta del 4 de noviembre de 1637, en que el Consejo de Aragón responde al Rey que, según indicaba su Majestad, podía castigarse en la forma expresada a los unos y premiarse a los otros. A. C. A., Conseju de Aragón, 281, 59. 8 1 Memoriales de protesta remitidos por los diputados y el Brazo Militar al Rey (3 y 4 de diciembre de 1637). A. C. A., Consejo de Aragón, 281, 2. 110

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz