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EL CARDENAL INFANTE, VIRREY DE CA'fALUÑ"A 37 LA DECLARAClÓN REAL. El día 7 de septiembre de 1632 acudieron a palacio los conselleres para determinar con S. A. las honras fúnebres del Infante D. Carlos. .ftcompañaban al Cardenal su confesor, fray Juan de San Agustín, el Conde de Oñate y el secretario Juan Lorenzo Villanueva. Una vez discutido el ceremonial correspondiente, leyóse a los conselleres, de parte del Sr. Virrey, la nota que días atrás se había recibido de Ma– drid y se la entregaron a continuación. Más tarde se leyó a los Brazos, que lo insertaron en su Diario de Cortes. Al mes siguiente respondió Barcelona con un extenso memorial. Aquella nota era el papel pri– mero de los tres que envió Felipe IV, y el único que entregó la Junta del Cardenal Infante por temor a hacerse reiterativos (111). En él se encarecía la .grande e inmerecida clemencia que había mos– trado el Rey con Barcelona y en general con Cataluña, no sólo al haber ·accedido a que las Cortes se sacaran de Lérida, sino al haber tolerado tantos egoísmos y miras particulares en la interrupción continua de aquéllas y al haber regresado para concluirlas y habilitado a un her– mano suyo para qu,,e con más sosiego y común satisfacción se pudieran disponer unas constituciones justas y convenientes. Barcelona no so– lamente quedaba honrada con tan ilustres huéspedes, sino enrique– cida con las rentas gruesas que en ella se venían gastando. Pero Bar– celona, en vez de mostrarse obsequiosa y reverente con su Rey, pa– :recia olvidarse de todo, afectando ignorar que la grandeza del vasallo estriba en su mayor sujeción y más pronta obediencia; porque ese es ~J medio de conseguir honras y reputación; todo lo demás, perder estima y lanzarse al precipicio. La pretensión que tenía de cubrirse ante Su Majestad era prerro– gativa que ni en España ni en toda su Monarquía la sustentaba reino, provincia ni ciudad. Bueno fuera que se informase antes de meterse en tales empeños. "La regla es que todos los vasallos han de estar descubiertos de- (111) El papel que entregó el Cardenal Infante comienza: "Las demostra– ciones del amor que su Magd... ". El original en AHCB, Delibs., fols. 395 v.-396. Copias en DACB, XI, 7 de septiembre; ACA, Proces de Oorts, Reg.• 50, fóls. 454 v.- 459.-El Rey habla enviado tres despachos numérados, en climax de exigencia!! y de conminaciones. La Junta del Cardenal Infante no entregó más que el primero: porque añadir Io'S otros dos seria echar leña al fuego. ACA, OA, 277.68.

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