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ANALISIS DE LA REBELION DE TUPAC AMARU 59 gasen al Inga al brazo del Rey al Cuzco, que toda est2. gente estaba echando la maldita contra el rebelde» (115). Continuarm_ las levas en el bando de los insurrectos, atropelladas por el temor, no agavilladas por el entusiasmo. Las «muertes, robos y atrocidades» cobraron sus víctimas (116). Si es cierto que José Gabriel Condorcanqui llegó a coronarse inca en el CoUao, y a entronizarse en el Gran Paiti-tí, debió de realizarse por estas fechas, entre los últimos días de enero y primeros del mes de febrero de 1781. En cualquier caso, guardóse secreto arcano del rito de la coronación. La"'concurrencia de ambos caudillos, José Gabriel y su primo her– mano Diego Cristóbal, por las provincias del Callao parece haber encel'ldido nuevos fuegos en la indiada. Cuando el corregidor de Paru– ro, teniente coronel don Manuel Castilla, en su marcha hacia el cerro de Yanacocha, ofrecía el perdón a los grupillos que se iba topando, le insultaron con desprecio, «haciendo burla de lo que se les decía». Uno de ellos, más nutrido, se le enfrentó con tanto brío, que sin la pericia y arrojo del sargento mayor Juan Antonio de Figueroa, pudo haberle infligido un fuerte descalabro (117). "'ll- El día 9 de marzo comenzaron a desfilar desde el Cuzco las seis columnas en que el mariscal y el visitador habían distribuido los 15.000 combatientes (indios los más de ellos), que formaban el contingente contrarrevolucionario. Plan de at!lque en dos fases: la sierra y el Co- , llao, en donde esperaban darse la mano con la tropa mistacada desde Buenos Aires. Las provincias rebeldes no constituían masa informe y ácrata. José Gabriel pareció reservarse las de Tinta, Chumbivilcas, Quispicanchi, Livitaca, con internadas en el Collao, pero no más allá de Lampa; su primo Diego Cristóbal, que había hecho de Azángaro su cuartel gene– ral, se movió principalmente por las de P'aruro, Paucartambao, Cara– baya, Azángaro y Paucarcolla (Puno); el sanguinario Julián Apasa (115) José Marnri a los caciques leales don Diego, don Jo~é y don Blas Chuqui– huanca, Asillo, 18 de enero de 1781: CDIP, II-2, 454-455. (116) Moscoso a Areche, Cuzco, 21 de enero de 1781: AGI, Cuzco, 77; Moscoso a Jáuregui, Cuzco, 4 de febrero de 1781: AGI, Cuzco, 76. «Estado del Perú», nota 39 del párrafo I y del párrafo III: CDIP, II-1, 342 y 360. (117) Relación de las operaciones d~ los habitantes de Parnn... a las órdenes de don Manuel Castilla: RAH, Col. Mata Linares, tomo 57, fols. 82 y sigs. «Rela– ción Histórica de los progresos...», RAH, Col. Mata Linares, tnmo I, fol. 298v. Jáuregui al rey, Lima, 15 de febrero de 1781: AGI, Lima, 660.