BCCCAP00000000000000000001054

266 L. IRIARTE La legenda franciscana inaugura una nueva etapa en la literatura hagiográfica, que hace emerger al santo de la realidad temporal y cultural, en que ha vivido. La misma tendencia de las fuentes fran– ciscanas a implicar al fundador en las vicisitudes de la evolución de la Orden, forzando a veces la interpretación de sus hechos y palabras, demuestra la voluntad de no desencarnarlo de la historia. 1 H. Grundmann, al reseñar el movimiento religioso femenino de los siglos xn y xm, llegando a Clara de Asís afirma: «Es la única de las santas mujeres religiosas de Italia central cuya biografia conocemos exactamente» 2 • En efecto, también en Clara se cumple lo dicho del cambio de rumbo en la hagiograña: la legenda se hace biografía, descripción de una existencia concreta, contorneada de trazos perso– nales y ambientales plenamente individualizados.ª Ciertamente, la importancia adquirida por la imagen central de Francisco ha hecho que, al igual que las demás personalidades de la primera generación franciscana, quedara relegada a un segundo plano la talla singular de la que nunca aspiró sino a ser la silenciosa «plantita» de su venerado Padre. · Más aún, como justamente se ha hecho observar, en esa nueva etapa de feminización del tipo del santo, bajo el impulso de la espi– ritualidad franciscana y dominicana, hay un predominio patente del laicado femenino bajo diversas formas: princesas y nobles, reclu-sas y consagradas como miembros de la Orden de la Penitencia. De las diez santas de los siglos xm y xrv, caµonizadas por la santa Sede --casi todas de la órbita franciscana-, la única religiosa claustral es santa Clara (el culto de su hermana santa Inés no será reconocido oficial– mente hasta el año 1752). La presencia de la mujer entre los modelos de santidad laical en ese tiempo forma el 44,5%, mientras que en la totalidad del santoral no pasa el 14,3%, frente al 85,7% de los hombres venerados como santos (A. Vauchez). Este hecho puede hallar una explicación en la mayor inserción de la mujer laica en el medio social, ya sea entregada a la vida retirada, 1 Cf. C. DuQUOC, A propósito de Francisco: El valor teológico de la leyenda, en Concilium n. 169 (1981) 416-424. 2 H. GRUNDMANN, Religiose Bewegungen im Mittelalter, Darmstadt 1961, 2ª ed., 194. 3 Cf. E. FRANCESCHINI, Historia y leyenda en la vida de santa Clara, en Sel Fran n. 40 (1985) 103-125; R. MANSELLI, La Chiesa e il francescanesimo femminile, en Movimento religioso femminile ..., Asís 1980, 239-261.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz