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-11- prt;iciso, por consiguiente, que·las cohsideracio11es sobre la vida de Cristo' se expon– gan de forma .diferente que las meditaciones anteriores. 'Los ~lasicos, ~9cÍos de ,9,1,'.a;Ael li,bro .de, los Ejercicios (n.º ~38-260). L' 1 Sobre . los ~andamfont,os, pidiendo ]lil gr::icia . µe conocerlos . y guardarlos mientras se van :recorriendo u119 a UllO; es un verdadero examen de conciencia: pero en forma de ·orac1ón. Sobre Ios siete pecados capitales, pidiendo también la gracia de conocer los pecados cometidos y de .evitarlos en adelante. Sobre las tres potencias del alma, pidiendo la gracia de conocer el desorden y el modo de us~,r bien de ellas.-Sobre los cinco sentidos corporales, de la misma manera. Es uno de los métodos más sencillos y prácticos de oración para los principiantes. 2.° Considerando las palabras de una oración vocal: «teniendo los ojos l'.!e– I'l'ados o hincados en un lugar, diga «Pater», y esté en la consideración desta pa– labra tanto tiempo cuanto halla significaciones, comparaciones, gusto y consola– ción... , y de la misma manera haga en cada palabra del «Pater noster» o de otrn oración cualquiera... » Esta consideración sobre el Pater noster durará una hota . . Si el primer día ha pasado la hora con una sola palabra, al día siguiente ha de volver sobre ella, dete~liéndose otra vez mientras halle gusto, y prosiguiendo.luégo con las demás. 3. 0 Modo de orar «por compás,>. Consiste en decir una palabra d~l Padre– nuestro o de otra oración entre una respiración y otra, meditando en el significad<: de cada palabra en ese espacio de tiempo. Bibliografía. R. MAUMIGNY, La práctica de la oración mental. A. BROU, St. Ignace maitre d'oraison. París, 1925. R. PLUS, La oración de todas las horas. Los documentos de elección Los documentos sobre la .elección son de .lo más perfecto que hay y de lo más típicamente ignaciand. Son fruto de multitud de experiencias del Santo y de los primeros jesuítas. a) Preámbulo para hacer eleccipn (n. 0 169).-Para una buena elección, el ejercitante ha de estar dispuesto en su voluntad con una pureza de intención, .de– seando absolutáhieht' subordinar su elección al fin para que Dios lo ha creado:. «1,0 ordenando ni trayendo .el fin al medio, más el medio al fin», ya que no faltan quienes escogen primariamente un género de vida y secundariamente se proponen servir ~ Dios en la profesión escogida. b) Materia de elección (n.º 170) .-Es todo aquello qué es indiferente o bae:– no en sí, y que «miíifa dentro de la santa madre Iglesia jerárquica». Hay, pues. gran amplitud; es contrario a esta condición el· presentar al ejercitante un solo objeto de elección, e. gr., la vocación religiosa"; esto sería una imposición. · Entran aquí todos lo~ estados; pero unos son inmutables, como el matrimonio o el sacerdocio escogidos ya; en este caso hay que cambiar los móviles si n.o fue1on buenos; otros son mutables, como abrazar o dejar un empleo, y en ·este caso, :si la elección se hizo debidamente y con buenos móviles, se han de purificar éstos; en caso cohtraric hágase nueva &!ección. c) Los tres tiempos para la elección (n. 0 175).-1. 0 ) Cuando Dios llama con gracias extraordinarias y medios palpables, como se dan casos.-2. 0 ) Cuando Se conoce la voluntad de Dfos «por experiencia de cons(J'laciones, y por experienci:' de discreción .devarios espíritus» .. Es muy .ignaciano; método difícil, pero seguro. San Ignacio lo practicaba en to(las las dec.isiones importantes de ·su vida. En Ja práctica serán poéos los casos en que se poárá aplicar.-3. 0 ) Es la elección que se hac(c) euaI1do el al:rria está en paz, con el libre uso de sus potencias naturalei;, examinanao 'las aptitudes·. físicas, moraler, dspirituales, temperamentales; este es . el primer modo de éste tercer· tiempo, modo racional. .El Sl!gundQ modo es psit"oló– gico y consiste eh preguntarse primero si el opjeto de elcción lo quiere mirandés sólo a la· voluntad de Dios; después pensar en lo .que aconsejaría a otra. persona
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