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FRAY FRANCISCO DE PAMPLONA do en la evangelización de los negros o indios salvajes, ya que, no siendo sacerdote, poco fué lo que pudo hacer. Su mérito está en. ·haber servido de punto de contacto . entre la nueva, Gongregadón romana, que aspiraba a recobrar las legítimas prerrogativas de la Santa Sede en la dirección total de la empresa, misional, y el Con-– sejo de Indias, encastillado en su secular tradición administrativa~ Ese momento, quizás. único en la historia de ambas instituciones, es el que tratamos de ilustrar a la luz de los documentos del archi– vo ,de Propaganda de Roma y del de Indias 'de Sevilla. Los equilibrios del cardenal Al'borrnoz. Corresponde a San Pío V la gloria de haber dado el primer paso· hacia una nueva etapa de la historia de las misiones, en que el Vi– cario de Cristo volviera a ser y conducirse como el responsable su– premo de la evangelización de· las gentes. Bajo su pontificado se planeó por primera vez un organismo central, directamente depen– diente del Papa, que descargase .esta. responsabilidad. Pero no se convirtió en realidad debido al mal semblante .con que fué recibi– do el proyecto por Felipe II (2). Los otros dos grandes Papas de la Restauración católica, sus sucesores Gregorio XIII y Sixto V, quisieron dar al asunto otro sesgo: enviar nuncios o visitadores c1postólicos a las Indias de España y Portugal. Hiciérons•e repeti– das gestiones en Madrid, pero sin resultado. Felipe II no quiso pasar por esta inspecdón pontificia en los dominios de cuya admi– nistración eclesiástica y misional respondía como «vicario del Papa» (3). Hubo que desistir de momento. Sin embargo, además de la Santa Sede, ,estaban interesadas en la solución ottas fuerzas vivas de la Iglesia : en el terreno político, Francia, que ahora sentía también sU vocación colonizadora y misionera; después, los nuevos institutos religiosos, pujantes de vida: la Compañía de Jesús, que~.• (2) PEDRO LETURIA, S. l., Felípe II y el Pontificado en un momento cul– min,an1te de la historia hisparrw-americana, en: . Bstudiois Eclesiásticos, r928, extr., 63 s. (3) LÁZARO :OE AsPURZ, O. F. M. Cap, La aportación extranjera a las mi-· siones esj)Cl!ñolas del Patronato regio, Madrid 1946, ¡55-159.

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