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LÁZARO DE ASPURZ, O. F. M. CAP. Fiel a su política intransigente en materia de regalías, el Con– sejo retuvo en 1659 las obediencias dadas por los superiores en nombre de la Congregación y las patentes de Roma cuando los ca– puchinos de Castilla tomaron la misión africana de Arda, a pesar de no entrar en el territorio de su jurisdicción (39). En 1662 se daría un paso trascendental con el decreto de Feli– pe IV creando el cargo de Comisario General de Indias, anejo a! provincial de Andalucía,· a imitación del que existía entre los fran– ciscanos desde 1572. Era el golpe de gracia al influjo de la Pro– paganda. El general de la Orden confirmó lo hecho el 4 de febrero de l 664, no sabemos si convencido por la expos.;ción hecha por el comisario nombrado, P. Francisco de Jerez, incluyéndole una copia de la bula de Alejandro VI, como prueba de que el Rey Católico poseía tales atribuciones, o porque sabía era inútil toda oposición. Pero el reconocimiento oficial no llegó hasta el 16 de junio de 1671> quizás con asentimfonto de la misma Congregación de Propaganda Pide. Esta ins~itución se completó en 1692 con la de un Procurador General de Indias permanente; pero esta vez se procedió más ca– nónicamente, limitándose el rey a suplicar al Padre general que expidiera el decreto y nombrara al titular (40). Todavía, sin embargo, los capuchinos no se atrevían a d~sen– tenderse de la aprnbación de los mis~oneros enviados por el Con– sejo por parte de la Propaganda. En este empeño por seguir de– pendiendo de Roma se distinguió el venerable P. José de Caraban– tes, que en 1666 tuvo la audacia de presentar al papa una carta de sumisión y vasallaje de cinco caciques de Cumaná y al año siguiente presentaba a la Propaganda la lista de los religiosos que él proponía para formar una nueva expedición, al mismo tiempo que suplicaba se instituyera canónicamente un comisario general para designar los misioneros en nombre de la Congregación (41). Y todavía en 1686 pedían los capuchinos a la Congregación se (39) B!BL.. NAc., MS. 3818, f. 49-51. (40) ARCH. PRor. FmE, SA, 258, f. 16; ARCH. GEN. DE LA ORDEN CAPUCHINA en Roma, Baetica, Sect. XIV Varia; NICOLAUS CORDUBENSIS, o. c., II8 s, 131 s. (41) ARCH. PRoP. FmE, Acta 1667, f, 143; SA, 257, f. 124: FROILÁN DE RÍONEGRO, O. F. M. Cap., Relaciones de Za,s misiones de los Padres capuchinos. en Venezuela, Sevilla 1918, 59. - 22 -