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866 CLAUDIO ZUDAIRE Se mantienen cinco tiples, un contralto, Juan Cerezo, y un bajonista; el contralto cobraba 828 reales, amén de algunos robos de trigo; a los infantes se les obsequiaba con nueve robos de cereal. A principios del siglo xx se fija el salario del organista en 450 pts, que ascienden a 850 para los años treinta, y a 500 pts mensuales para la década de los sesenta, pagadas a J. Martínez organista por estas fechas. Poco a poco se perdió la huella de los demás músicos de la capilla, que llegó a la extinción, hasta que el nacimiento de la nueva Coral trajo auras de renovación. En 1918 el organero Emeterio Inchaurbe, de Zaragoza, montó el órgano nuevo utilizando materiales del anterior. Incluimos en el apéndice el contrato con especificación de los juegos y otros detalles de interés; esto y el veredicto emitido por don Bonifacio Iraizoz organista de la Catedral de Pamplona, y don Félix Zabalza, también or– ganista, es cuanto conocemos del mismo. A la construcción de este órgano contribuyó el ayuntamiento: a sugerencia del párroco don Ma– riano, la municipalidad suscribió una ayuda de 500 pts. (la mitad de lo sugerido); la factura final del órgano ascendió a 5.100 pts. Éste es el órgano que desapareció en el incendio sufrido por la iglesia de Falces en 1938. 27 Hay indicios de la existencia de una banda de cierta entidad a la que gratifican 60 reales por solemnizar la procesión en los años 1889-91. Posteriormente la banda adquiere solera con fondos del Ayuntamiento. Esto motivó la petición razonada de varios vecinos de Falces reclamando se hiciera un kiosko en la Plaza de los Fueros (año 1929) "el que además de hermosear la misma, servirá para el fin que se ha indicado evitando con ello, la aglomeración de público que cercando el conjunto de la banda, impide a ésta desarrollar la interpre– tación exacta de las piezas musicales que ejecuta". Este problema existía ya antes y obligó a que "dn Severino Díaz alcalde constitucional de esta villa" diese el siguiente bando: Hago saber: que siendo ya tan repetidos los abusos que vienen cometiéndose en la Plaza de los Fueros, durante las horas que en la misma se halla instalada la banda de música, para solaz y entretenimiento del vecindario, y con el fin de que resulte, en la práctica, realizado el principal obgeto que el Ayuntamiento de esta villa se propuso al subvencionar anualmente la referida 27 En la obra Órganos de Navarra de Aurelio SAGASETA y Luis TABERNA (Pamplona, 1985) se dice (p. 450): "desapareció su órgano barroco a raíz de un incendio (1938)"; no se alude a la restauración de Inchaurbe cuya reforma constituía casi un nuevo órgano con utilización de lo aprovechable del antiguo. [ 24]