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LA VIDA MUSICAL EN LA PARROQUIA NAVARRA DE FALCES 865 órgano con la debida perfección, y tocará el órgano en todas las funciones eclesiásticas, cumpliendo según se ha hecho y devido hacer hasta ahora; todas sus obligaciones se expresarán en los actos de nombramiento con la mayor especificación. Este número parece contradecir, en parte, al citado más arriba, pues obliga al organista a preparar a cuatro tiples. El ;oficio de sacristán vuelve a ser bien retribuido e independiente del de organista al que se le priva de la distribución de los bienes del hórreo. El organista además de las utilidades eventuales percivirá 130 ducados de plata de las rentas primiciales en cada año, la qual cantidad será mayor o menor según pudiere proporcionarse por los cabildos eclesiástico y secular de Falees, con el devido celo de los intereses de la iglesia y con aprobación de este tribunal diocesano. Los marqueses tenían derecho de presentación de los diversos candidatos, excepto para organista y sacristán "en virtud de donación real hecha por el Sr. Don Juan Rey de Navarra, Infante Gobernador Gral. de Aragón a Mosén Pierres de Peralta, su mayordomo, para sus hijos, herederos y subcesores". Continuando, pues, la tradición bien establecida en los siglos ante- riores, se especifica la forma de elección de organista: El Vicario, Beneficiados y Alde y Regidores, Cavildo eclesiástico y secular de la Parroquial de Palees elegirán un sugeto honesto y proporcionado para el mejor desempeño del empleo de organis– ta, y este nombramiento que ha de ser revocable siempre que por cualquier razón o motivo se estimase así conveniente y ventajoso, será aprovado por SS o su Vicario General (n. 0 23). No parece que este plan sucesivo fuera a impulsar la vida musical de Palees; la última cláusula formulada sin matización alguna, retrae– ría a más de un candidato. Sin embargo parece recuperar parte de su vitalidad. El único libro de cuentas de la Primicia, actualmente conservado, arranca en 1833 llegando casi a nuestros días; de él entresacamos algunas noticias. Manuel de Narvajas es el organista y maestro de capilla desde 1833 al 41. El sueldo de 1200 reales en estas fechas ascendió a 2300 para el fin del siglo; esta remuneración en metálico era muy mejorada por la percibida en especie. Fermín Cerezo, que ejerció el oficio durante más de 30 años sucediendo a Narvajas en el cargo, unos 3.500 reales por el importe de 15 cántaros de vino y 25 robos de trigo. [ 23 l