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Toda transgresión de los mandatos de la ley importa pecado mortal 53 • Es evidente que esta doctrina es igualmente aplicable a la ley evan– gélica. El Tostado lo confirma, sin dejar lugar a ninguna duda, cuando estudia el problema de la limosna: ¿la limosna es obligatoria bajo precepto?, es decir, ¿su omisión constituye peca,do mortal,? Para resol– ver este problema, el Tostado com1enza afirmando el siguiente princi– pio: todo lo quae cae bajo precepto es obligatorio bajo pecado mor– tal: « Omne quod cadit suh praecepto aliquo tempore, obligat trans– gressores ad peccatum mortale » 54 • Y continúa el silogismo: es así que la limosna, ,en ciertas circunstancias, cae bajo precepto; luego su in– cumplimiento constituye algunas veces pecado mortal 55 • P.ero el Abulense parece no quedar satisfecho con esta exposición y, como si adivinara la objeción que le iban a oponer, a saber, que el pecado venial, poÍ ser obra i!lícita, debe estar prohibido bajo pre– cepto, acepta la dificultad y la resuelve mediante una argumentación que no hemos encontrado en ninguno de los teólogos anteriores. La ocasión propicia se la ofrece aquel pasaje evangélico en que el Señor amonesta a sus discípulos que no hagan sus buenas obras para ser vistos de los hombres (Mt 6, 1). ¿Se trata de un precepto o de un consejo? El Abulense reconoce que la vanagloria constituye siempre pecado, pero no siempre pecado mortal. El nudo de la dificultad se reduce, por tanto, a saber cuándo realmente está prohibida bajo pre– cepto. La solución del Abulense es clara y terminante. La vanagloria, a veces, es pecado mortal y, a veces, pecado venial; cuando es pecado mortal ciertamente cae bajo precepto o prohibición; en cambio, cuan– do es pecado venial no ,está prohibida bajo precepto, sino bajo con- 53 IDEM, Paradoxa [Opuscula varia], paradoxon 5, cap. 113, en Opera omnia. t. 25, Venetiis 1615, fol. 92v: « Iudaei, qui a data circumcisione usque ad legis– lationem extitenmt, ad so1am fogem citcumcisionis obligati erant. In aliis autem poterant facere ex arbitrio, dum tamen non militarent contra praecepta leg1,\ naturae expressa aut contra quodcunque conscientiae dictamen. Ideo nunquam– mortaliter isti. pecca.tent, nisi cum aut circumcidi recusabant vel negligebant... veL ut convenientius dicamus, si parentes circumcidere aut negligerent aut recusa– rent, vel contra legem naturae agerent. Cum vero lex suscepta est, non solum ad circumcisionem supra legem naturae obligati erant, sed etiam ad omnia legis mandata, contra quae agentes mortaliter peccabant, secundum ipsius legis deter– minationem ». 54 IDEM, Commentaria in tertiam partem Matthaei, cap. 6, q. 34, en Opera omnia, Venetiis 1728, t. 20, p. 29. 55 Ibídem. 22

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