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196 Miguelángel de Espinal es decir, a la intención gratuita, caritativa o piadosa algún influjo sobre la licitud y carácter de dichas obras materialiter serviles. Sin embargo, no se debe exagerar este influjo, como quizá lo hace Ph. Delhaye, quien pretende que Alejandro de Hales atribuye al finis operantis, es decir, a los elementos subjetivos un influjo superior al de los elementos objetivos o materiales. << Elle [la Summa fratris Ale– xandri] interdit les mechanica opera selon les idées nouvelles en cette matiere, mais elle fait si peu de ce critere une regle absolue qu'elle ne l'applique pas si ces travaux manuels se font dans un but désintéressé. Sans doute, dit cette Somme, les activités matérielles sont serviles de par leur nature, mais construire des églises, des hospices, des maisons religieuses est permis le dimanche en raison du but charitable ... On le voit done, la Summa tient compte de l'aspect financier des activités et lui donne meme la prééminence sur l'aspect générique, puisque c'est lui qui détermine la liceité des travaux manuels >> (52). Creemos que Delhaye exagera algo al atribuir al finis operantis un influjo prepon– derante; pero sería igualmente exagerado despreciar como nulos e ineficaces los elementos subjetivos._ Finalmente, no se puede tampoco negar a Alejandro de Hales el mérito de haber planteado este problema, que otros teólogos franciscanos estudiarán con mayor detención. Algunos años más tarde el seráfico doctor san Buenaventura viene a proponerse bastante claramente el mismo problema, y apunta su solución favorable al influjo del finis operantis, es decir, al influjo de la intención de divertirse honestamente y del afán de lucro y riquezas. Efectivamente, el seráfico Doctor enseña que el domingo fué instituido para que el cristiano, desentendiéndose de los cuidados y negocios terrenos, se preocupe de modo especial de las cosas que miran al culto divino. Y la Iglesia, por su parte, ha prohibido los negocios terrenos, y se ha venido a darles el calificativo de serviles principalmente cuando por medio de ellos se busca con afán el lucro de la tierra. << Ut igitur ... reverentia cultus soli Deo exhiberetur, praefixa fuit dies dominica, in qua populus christianus specialiter vacaret ad cultum Dei et praeter– mitteret terrena negotia, .quae animam distrahunt ne Deo intendat. Unde illa opera inhibentur ab Ecclesia; et talia dicuntur servilia, illa maxime in quibus horno inhiat terrenis lucris, et quae sunt praeter necessaria ... >> (53). (52) DELHAYE PH., Le repos dominical, en L'ami du clergé 68 (1958) 232. (53) s. BONAVENTURA, In I I I Sent., d. 37, a. 2, q. 3, dub. 3, en Opera omnia, i. 3, Ad Claras Aquas 1887, 832.