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tos lií:!t.rcrosos nE iARAcotA... rn momentos de mucha desconfianza entre los sitiados : los dedos de las manos se les antojaban traidores dispuestos a comunicar al ene– migo secretos de guerra. Y así, según nos dice Alcaide Ibieca (25), "algunos propusieron que los eclesiásticos y ciudadanos honrados hicieron guardias en las puertas". Religiosos de San Francisco coad. yuvan a la evacuación de enfermos del Hospital de Nuestra Señora de Gracia cuando la catástrofe (26). Fray Ignacio Santarromana co– labora a introducir pólvora en la ciudad (27). A principios de agosto el monje del monasterio de Piedra, Fray José Garín, al frente de una porción de paisanos, hace huir a unos treinta fran. ceses (28). En la última decena de noviembre de 1808 el militar criticaba ciertos preparativos, el religio•so y el eclesiástico avivaban el entusiasmo popular (29). Muchos eclesiásticos, religiosos y per– sonas que no podían tolerar tareas penosas, concurrían a las casas inmediatas al almacén de la pólvora y hacían cartuchos (30). En una operación del 31 de enero de 1809 perecieron tres hombres: se ignoran los nombres de dos de ellos, "así como el de un capu• chino que ya se había distinguido en varios choques, y quedó yerto en el acto de suministrar a un moribundo los auxilios espiritua– les" (31). Entre los que hicieron servicios distinguidos hay que in– cluir al religioso de los mínimos Fray Mateo del Busto, capellán del segundo tercio de Zaragoza, que había prestado todo género de socorros a los heridos (32). El acendrado patriotismo de los religiosos quedó manifiesto en su ministerio propio, como se patentiza en el certificado extendido (12,5) Tomo 1, pág. ,171. (26) Tomo I, pág. 198. ,(27), Tomo I, pág. 185. (28) Tomo I, pág. 220, (29) Tomo II, pág. 28• .(30) Tomo II, p. '130. FAUSTINO CASAMAYOR, Los sitios, p. 34, nos dice que el 9 de junio de ,1808, obedeciendo órdenes de Palafox, los dominicos, franciscos y capuchinos e.stuvieron haciendo cartuchos todo el día. en la casa de Misericordia. Y, por •su parte, RAMON CADENA, Los sitios, p. 126, puntualiza que el ProvfociaJ de capuchinos era el primero en acudir a hacer cartuchos. So,specho que e•s el mismo P. Provincial de los capuchinos de Aragón fallecido en una casa particular y enterrado en el "carnerario" de los escolapios el 4 de marzo de '.1.809. Véa•se P. ÁNGEL PASTOR BELTRAN, o. c., p. 56. ,(31) Tomo II, pág. ,157, (32) Suplemento, pág. 1,36.