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AZARES DE LAS MONJAS DE ARAGON 187 CaJatayud.- Aunque en el hecho no interviene el Auxiliar, recordemos el paso de las "monjas francesas llamadas salesas" (DDC) de Zaragoza a Calatayud. Su superiora, sor Teresa de Jesús Alba– ret, el 7 de febrero de 1806, por carta en francés comunica al Arzo– bispo que una real orden les permite trasladarse a Calatayud, a establecerse en forma de comunidad perpetua. El 12 del mismo mes (DDC), el Arzobispo, desde Madrid, se alegra por la alegría de las religiosas, al paso que siente que desamparen Zaragoza don– de tan contentas han vivido. La misma superiora, el 22 de abril inmediato, agradece el donativo arzobispal y proclama que se glo– riarán siempre de haber pasado siete años en su diócesis. Zaragoza.- Con el traslado de las salesas no queda desmante– lada la ciudad de Zaragoza. Permanecen en ella muchas comunida– des, como las bernardas o cistercienses de Santa Lucía, las comenda– doras canonesas del Santo Sepulcro, las carmelitas observantes o calzadas de la Encarnación, las carmelitas descalzas de Santa Te– resa o Fecetas, y las de San José, las dominicas de Santa Inés, de Santa Fe y de Santa Rosa, las mónicas o agustinas observantes o calzadas de Santa Mónica, las de la Compañía de María o de la Ensep.anza, el colegio de las Vírgenes, las clarisas de Santa Cata– lina y las de Santa María de Jerusalén, las franciscanas o concep– cionistas franciscanas de Nuestra Señora de Altahás, y las capu– chinas. Los asuntos de que hay huella estos años, son de ordinario fá– ciles de adivinar : licencias para la exploración de voluntad de tal o cual novicia, designación de confesor, etc. La priora de las Fecetas el 21 de octubre de 1805 (DDC) ex• pone que hay una enferma que lleva semanas sin comulgar y la pobre necesitará más de este consuelo. Se le autori:ia al director para que le administre la Eucaristía de quince a quince días, o al arbitrio de su prudencia. Las Constituciones citadas de las Cu.evas de Cañart señalan que las religiosas pueden comulgar tres veces por semana : domingo, martes y jueves. En 1806 en Santa Rosa pasan días amargos por lla enfermedad mental de una religiosa (DDC). En el "convento de la Compañía de María Santísima, vulgar-