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-17- den recitarse durante la misma las horas canónicas ; la razón no e5;. que así .se superponen dos actos litúrgicos, sino que la Iglesia los ha ordenado siem– pre como actos sucesivos, no simultáneos, para completarse mutuamente. 2) Y a que la misa conventual no sea solemne, la In.strucción afirma la con– veniencia de que se organice con participación litúrgica directa (núm. 31), evitando todo uso de la lengua vulgar ; esta restricción se entiende, parece claro, a no. usar la lengua vulgar en todo el contenido de dicha participación, no a ciertos cantos que se puedan cantar por razón de la solemnidad, ·como ya hemos explicado más arriba. . c) Finalmente se recuerdan ciertas rúbricas, entre las que sobresale por su practicidad la referente al tiempo de sw celebración; en 1;>tincipio se debe ·decir post tettiam; mas por causa grave el superior de la comunidad podrá mandar dedrla post sextam vel nonam; EL COMENTADOR U na asamblea de cristianos, i'eunida para dar culto a: Dios ·pof medio · de los actos litúrgicos, está condenada al fracaso· si le falta un guía:. Es una constante de todos los cultos y también de la Iglesia; una de las principales fondones del diácono en todos ·los primeros siglos de la Iglesia• •foé · 1a de guiar ~ los fieles durante .los ados de culto: guiar su· actitud, sus. gestos, sus plegarias. El actual movimiento litúrgico se había esforzado desde el primer momento. en resucitar esta figura Jitú:i;-gica, caída en· desuso o plena– mente desapárecida; a este fin se hábían escrito páginas muy ponderadas, como las que una vez dedicó al tema la revista Lumen vitae (véase LEON DE CoNINCK, La messe du dimanche. Cuide pratique de la . messe com– mentée, en LUMEN VITAE 7(1952)23-37). Mas Ja Iglesia seguía en silencio sobre elter:na, hasta que la presente Instrucción le dedica una atención tan particular que representa el nacimiento moderno de esta figura litúrgiqo- jurídica. · · El nombre: A este guía de la asamblea cristiana se le llama éomentad:m-, palabra que en la .hístoria litúrgica no creemos que tenga historia especial; éstá escogida, indudablemente en razón del oficio que presta· a la com~hi- dad. En castellano se le llama con buen acierto Dirigente. · La finalidad del cargo : Se da a la• com1midad un cotpentador :i fin .de que pueda partidpar activamente en la liturgia, sobre todo, en la santa n'iísa y en ciertas acciones litúrgicas complicadas, por ejemplo las de .semana santa. Como se ve, la Iglesia ha querido conservar inmutable el oficio y figura del diácono, que ..,en muchos lugares estaba ya sometida a transformacíón, y ha preferido crear otro oficio o cargo distinto. . Contenido del oficio .de comentador : a) intervenir en. momentos '6pli>t– tunos, no. intempestivamente; b) y con pocas palabras, c) pata explicar ó<dár el sentido de los mismos i'itos que se celebran, d) de las.oraciones que reza el sacerdote, e) de las lecturas que hácen el sacerdote O• los ministros, f) final– tner:l'te, para. dirigir la participación de los fieles en resp.uestas> .oraciones y cantos. Delineada así la figura del comentador y precisado S1'1 cometido, la In·s– trucción quiere 01:denar más de cerca s1r actuaciún, solucionando de antemano muchas dificultades que se van a presentar en la ,práctica.

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