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-10- ta.nolp, aJención ·. a ·las· ·<}isHntas partes .. ele J4 mi~, hién,, ,.d~ .· m~~r,a. ·e~ter~~ :según.las diversas y probad:1s costµmbres ele Jas .xegioqes (~um. 29). Este primt:lr párrafo n.ecesita. ya. algunas .aclaraciones ante.s qe .pasar ,adelante; ll¡l, primera que en él se toma al .fiel ut singulus, asista urio o a~istail mil 'a la misa, ,s,in llegar. a formar comu;nidad. o asamblea e.xterna (sobrenatural– mente ya he,mos dicho que en todo acto litúrgico la virtud comunitaria proviene de la misma oficialidad o carácter público del acto mismo). ¿Ese .fiel ut singulus cómo puede participq).'. en la misa? a) De una manei;a interna y siguiendo mentalmente cada parte de la misa. Se habrá notado cómo se habla de participaci6n interna tanto al enu– merar los tres elementos de que consta la participación, como ahora al tratar del primer modo de participación. Por algunos matices se podría creer que se trata de una misma cosa, mas por otros muchos es claro que se trata de dos cosas distintas; Allá se trataba de una disposición anímica, de no tener distanciadas las potencias superiores del acto que se está realizando; aquí se trata indudablemente de. mucho más, como es el ejercicio de las mismas., sobre un objeto no simp)e, sino. complejo. . b) De una manera externa, echando mano .de algún medio externo, .que ayude a la inter11a. Entre estos medios la Instrucción alaba (ii potissimum in hac re laude digni sunt... núm. 29) eluso del misal acomodado a la capa– cidad de los fieles, ya que de esta manera ruegan unidos· al sacerdote con ·las mismas oraciones de la Iglesia. . · · ¿Quedan cerradas con esto las posibilidades de la iniciativa personal para participar en l:::1. misa? En manerá. alguna, y en este momento. es donde se puede apreciar una verdadera condescendencia maternal de fa Iglesia, que tiene muy en cuenta no sólo la diversa capacidad intelectual y humana de los. millones de sus hijos, sino también las circunstancias psicológicas, mudables como la luna, de ,cada Jndividuo. .. Por eso, la Instrucci6n, siguiendo la ene. Mediator Dei, admite estos medios internos Y- externos de participación personal o individual (no común); · -La devota meditación de los misterios de Jesucristo. -Otros ejercicios de pieqad. -Rezo de distintas oraciones. Razón teológica que asegura el uso de estos medios últimos: Difieren de los ritos de la, misa en la forma, concuerdan con ellos, sin embargo, por su naturaleza, es decir, en cuanto sirven para dar culto y santificar a las almas. Este primer modo_ de paiticipaciqn ha suscitado. antes de áhora, y estarnos seguros de queha de .seguir suscitando amplias polémicas, general~ mente porqm~ se plantean los problemas inadecuadamente, embarullando la realidad obíetiva con las situaciones sujetivas, y admitiendo buena •parte de culpa la actuación de los pastores de almas y en general de los sac;erdo– tes. Objetivamente, lós fieles, ut singuli, que tienen más gusto y sacan má~ provecho de. rezar u,nas .oraciones o de meditar la pasi6n del Señor que de seguir tant.o interna _como externamente la misma misa, es que por culpa de los sacerdotes sufren en su vida espiritual un fallo.- tremendo; por eso, se imponen campañas profundas para queJa mayor parte delos fieles com~ prendan la misa y sean capaces de seguirla al menos internamente en sus partes :r;nás .importantes : Acto de contrición, ofertorio del pan y del vino · corno símbolo del ofrecimiento anticipado de toda la misa. y de la propia