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recordar el acondicionamiento de parte del mismo, en 1921, para casa cuartel de la Guardia Civil 1 28 • 3. El entorno del convento iba cambiando, sobre todo para abrir las carreteras, calles y paseos de la ciudad. Una de las más importantes vías de comunicación que atravesaba la población es la N-122, de Francia a Portugal, por Zamora. Su trazado, junto al antiguo convento era muy angosto, lo que provocaba frecuentes ac– cidentes. Por este motivo, el ayuntamiento inició un expediente con objeto de facilitar la ampliación de la carretera mediante la ocupa– ción de una esquina del hospital Sancti Spíritus. Aunque se trataba de un espacio muy pequeño dió origen a un voluminoso expedien– te. El alcalde pidió a Beneficencia que autorizase el ensanche de la carretera. La Dirección General encargó a la Junta de Zaragoza que informase sobre dos puntos: Si la esquina que se pretendía derribar pertenecía a la Fundación Sancti Spíritus o era propiedad del ayun– tamiento; en segundo lugar sobre la superficie afectada por esta re– modelación. El alcalde Sr. Ojeda presentó, el 9 de noviembre de 1967, al gobernador civil de Zaragoza, un croquis con los metros cuadrados que se pretendían ocupar, informando que «el trozo de esquina que se trata de derribar está cubierto por un tejadillo más bajo que el resto del edificio, contiguo a éste y formando parte con él; por tanto, pertenece en propiedad a la Fundación mencio– nada. Mientras la iglesia se destino al culto, en el referido lugar se guardaban efectos de utilización de la iglesia». Menudeó la correspondencia con las diversas entidades impli– cadas; entre ellas, con el obispado de Tarazona, por tratarse de un lugar sagrado. A la comunicación del alcalde, Borja 7 mayo 1969, contestó el canciller, Tarazona 13 mayo 1969, que el obispado nada 128 AMB caja 586-7. Allí permaneció durante unos 50 años, hasta su traslado a las ac– tuales instalaciones. -118-