BCCCAP00000000000000000000986

La situación se agravó durante los años calamitosos de 1803- 1808 a causa del hambre, de las epidemias y de la peste. Se convi– ritió en plaga social la dedicación al contrabando, que fue practica– do y blanqueado incluso en las casas religiosas 75 • A fuer de realistas, no prescindiremos del todo de los aspectos bélicos, ya que repercutieron en el convento de Borja. No son pocos los datos conservados en el archivo municipal de la ciudad. Así el expediente instruido el 20 de diciembre de 1809 por Vicente Enríquez Perea para el arriendo de todas las per– tenencias de los conventos borjanos, entre ellos el de capuchinos. Pasaron los peritos: Fue tasado por 55 duros al año. «La huerta de capuchinos, que se hallaba arrendada a Manuel Carnicero en 102 duros, aumentado el cuarto, pasa a Rufino Urchaga en 150 duros, en tres pagas» 76 • Consta que el convento fue convertido en cuartel por los ocupantes y que, desde él, dominaron la ciudad 77 • Baste esta alusión bélica, para centrarnos en un hecho que tuvo más incidencia: La supresión, la dispersión y posterior difícil restauración de los religiosos y de los conventos. 75 Véase el estudio especializado de NADAL, J. «Les grandes mortalités des années 1793 a 1812». Problemes de mortalité..., París, 1965, pp. 409-421. 76 AMB caja 522-16. Se añade: «Valga para el Reynado del Señor D. José Napoleón l.º, rey de España y de las Indias, y año 1810». Todos estos bienes conventuales fueron agre– gados al ramo de los Nacionales. Véase ambién lbid. caja 522-31, de igual contenido para 1810. 77 Son valiosos los datos conservados en AMB caja 1146-11, con una cuenta de gastos en las obras y suministros del cuartel de capuchinos en 1812, así como obras ordenadas por orden del Señor Caballero, Comandante de la Plaza de la ciudad de Borja: 42 libras, 16 sueldos, 13 dineros. Para subsistencia 74 duros. Para cerrar la porción de pared «que batieron los Españoles en el portal de San Francisco con orden del Sr. Comandante y de acuerdo del Sr. Corregidor Municipal, es a saber, 3 libras, 12 sueldos, 8 dineros. Hay también repartos echados a la población para las tropas francesas, y para las españolas, que estaba con ellas». Para el horno del cuartel de capuchinos 4 libras, 12 sueldos, 8 di– neros. Hay facturas y pagarés muy detallados. -98-