BCCCAP00000000000000000000986

Fue una guerra poco clara para muchos militares y nefasta para teorizantes ilustrados. ¿Dónde se escondía el enemigo y contra qué se luchaba? Era inaceptable la presencia bélica del ejército francés, pero se intuía que en España tenían que cambiar muchos elementos del antiguo régimen. La guerra de la Convención llegó a Aragón y repercutió sobre sus tierras e instituciones, aunque no son muchas las noticias referi– das a Borja. 5.2. La guerra de la Independencia Entre la guerra de la Convención y aquella de la Independen– cia existieron lazos estrechos, sin vacíos ni discontinuidad. La pe– netración ilustrada no conoció treguas ni pactos. La Iglesia sintió, quizá más que ninguna otra institución, el avance del nuevo régi– men. Anselmo de Legarda descubrió a fondo la situación religiosa de Aragón al estudiar, con excelente documentación, a Miguel de Santander, obispo auxiliar de Zaragoza durante la ausencia del ar– zobispo Arce, nombrado Inquisidor General. Se trataría del persona– je más representativo, acusado de sentimientos filogálicos, tanto en sus visitas pastorales, como en sus sermones y en sus normas de gobierno. Quizá no veía la forma de superar aquella ocupación odiosa, sino dialogando con los ocupantes 74 • No hemos visto estudio más lúcido y sólido sobre los vanos estamentos del arzobispado de Zaragoza y sobre el gobierno de las otras diócesis aragonesas, como visitador y gobernador de ellas. Desde esos cargos influyó, no poco, en la diócesis de Tarazona y en sus instituciones, más replegadas y más tradicionales. 74 Citamos este estudio en la nota 70. -97-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz