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Las cosas de los Capuchinos en el siglo XVII 351 seaua que se dispusiese por la eleccion de su Beatd., sin nombrar ni reprobar más personas que no tener por conveniente los de la parcialidad del General, la de Recanate, ni la contraria, pues de una y de otra se perdería la Religion, quedarían siempre los embara– zos y el disgusto de repetirlos a su Santd. Que para que fuese mas fiel testigo desto, biese su Beatd. cómo hauiendose cumplido pun– tualmente en Napoles lo que le mando escriuiese a aquel Virrey tocante a dejar correr los Capítulos del Reyno, asegurandole su Santd. y el protector serian elegidos sugetos indiferentes y si no los quitaria su Beatd., se vio fueron todos los electos de la parcialidad de Recanate y que no se hauia reparado este daño. Que no obstante, para acreditar V.Mgd. más el sosiego y la reuerencia, con que be– neraua la Persona ·de su Santd., aunque hera tan buen Religioso el Padre Xerez, combenia en que no fuese elegido, porque no que– ria hubiese ningun escrupulo en el animo de su Beatd. de que por parte de V.Mgd. se caminaua con otro fin que el de la quietud de los Religiosos y consiguientemente la de sus Reynos, pues si asistían a su instituto hera lo que se necesitaba, y lo contrario muy dañoso. [5] Que con esto entro el Papa a hablar en los sugetos y a discurrir en las faltas de cada uno, como él mas bien informado. Y hauiendo dicho al Marques en gran secreto no convenía fuese General fray Bernardo de Puerto Mauricio Genoves, por ser el único que quería Recanate y tener ochenta y dos años, que le hacían incapaz de exen;er el puesto, ni tampoco fray francisco de Perusia por mozo y del partido de Recanate, le dio gracias por ello, suplicando a su Beatd. persistiese en su buen dictamen y su Santd. ofreciendo que lo haria, le ordeno que para que fuese mas bien dispuesto, hablase en su nombre al Protector y le digese lo mismo que el Marques le hauia referido, y hauerle mandado que a todos los Vocales les expresase siguiesen el dictamen del Protector, pues hera el mismo que el de su Santd., con que no podía recaer mal la eleccion, pues el Marques estaba cierto quanto deseaua su Beatd. la eleccion en indiferente. Que asegurandole su Santd. esto, le pidio quedase Difini– dor el Padre Xerez, y ofreciendolo con grandes muestras de segu– ridad, se dispidio (sic) el Marques. [6] Y el dia siguiente fue a ver al Protector, el qual hallo muy <;errado, respondiendo no estar en su mano hazer la eleccion, con que el Marques le dijo que tenia todo lo que necesitaua; que esto se procuraba por el mayor bien de la Religion y se inclinaba el Papa a ello, y que si despues de hauerse faltado a todo lo ofrecido en los Capítulos de Napoles, se faltase tambien en este, recayendo los puestos en los de uno u otro partido, no habra más experiencia

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