BCCCAP00000000000000000000982

Estado e Iglesia en España a la luz de las asambleas del clero en el siglo XVI 323 4.5. El empleo del dinero de la iglesia El problema de la riqueza de la iglesia no termina con la constatación h/stórica. Las asambleas se encargaron de lanzar a la arena otro dato que siempre debe ser tenido en cuenta. Esas 100 ó 200 personas del capitalismo eclesiástico podían emplear sus beneficios en regalar sus personas y en satisfacer diversiones como la caza y el juego. Las acusaciones de las fuentes suelen ser muy variadas. Pero no era esa la regla. España entera era testigo de que las grandes fundaciones de Alcalá, el colegio de Santa Cruz de Valladolid, los colegios episcopales de Salamanca, incontables casas religiosas y hospitales vieron la luz y seguían viviendo gracias a las rentas de la iglesia. Las asambleas no alardean, pero no pueden silenciar cómo el dinero de la iglesia acudía a remediar extensas áreas de las necesidades sociales y sanitarias, sobre todo en grupos demográficos de cierta consistencia. Existían los tesoros de cultura, de arte y de metales preciosos, que se iban acumulando en las catedrales, monasterios y casas religiosas; pero a este aspecto no se le prestaba entonces la importancia de tiempos sucesivos. Lo que las asambleas repetirán, en cambio, con reiteración es que la iglesia sostenía las dos partes del estado seglar, lo que iba resultando intolerable. Existen otros temas que se desprenden de las actas de las asambleas como fruta madura: la relación entre las iglesias locales, los piques de preeminencia entre ellas, las ayudas mutuas en momentos de necesidad, la marcha intensa de las reuniones y la repulsa contra los altos dignatarios eclesiásticos, servidores de la corona al ejecutar el subsidio y el excusado. Por extensión, cómo fueron recibidos los repartimientos de las asambleas en cada diócesis y cómo fueron repartidos a su vez sobre el clero diocesano; pero tales temas desbordan nuestras metas. 5. El constantinismo, elemento para una síntesis socio-religiosa Ya hemos insinuado que no es difícil descubrir las dos grandes instituciones que viven en la gran estancia de la sociedad renacentista hispánica del siglo XVI. Pero no resulta fácil penetrar y definir las relaciones entre ellas. Huiremos de repeticiones y aportaremos algunos datos válidos para enten– derlas. Estado e iglesia El estado moderno, en camino para la recuperación del poder político centrado en la soberanía de la corona y del monarca, proyectó un ambicioso ocurrió tal cierre de iglesias. En principio, los pasajes citados parecen timbres de alarma; pero aluden con seguridad a grandes sufrimientos del clero rural.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz