BCCCAP00000000000000000000974

Zudaire Huarte, Claudia: Organerías IX. Provisión de Organista en Urnieta (s. XVIII-XIX) 13, de quien únicamente se hace uso, está muy desafinado, por lo que incomoda a todos los que oigan; así mismo todos los demás registros que contiene el órgano se hallan unos mudos, otros fuera de su sitio, otros sin régimen por estar rotos los registros, y así mismo los tiradores como también el teclado, los fuelles igualmente bastante dejados, y habiendo sido preguntado por dicho señor comisionado qué coste podía tener su composición para celebrar con decencia las funciones de la Iglesia, digo que examinado todo según mi conciencia, vendrá a costar la cantidad de 3.500 rls. de vellón; y si como desea se ponen los fuelles de modo que se inflen por medio de otros cuatro fuelles menores que se moverán alternando por medio de una cigüeña (y declaro es muy conveniente así para la conservación de los mismos fuelles mayores como para el mismo órgano y también para el entonador) costará esta obra de fuelles 1.100 rls más sobre lo anotado arriba, y advierto así mismo como debo advertir que con la estación presente en la que se ha adelantado mucho en la música, todo organista aun de mediano gusto se halla muy incomodado y con justa razón con teclado corto, por no poder ejecutar las obras del día que piden teclado más extendido y es que el teclado sea de octava tendida por la mano izquierda y hasta refautre sobreagudo por mano derecha para que las obras no pierdan su mérito; por tanto es muy del caso dar nueve teclas más para que se tañan y oigan con gusto muy diferentes las obras del día, y para lograr esto, se precisa hacer de nuevo así el secreto como todos los demás tablones de la dirección del aire y otras muchas piezas nuevas cuyo coste será de 3,600 reales, de suerte que el total de la obra con inclusión de fuelles en cigüeña y aditamento de teclado se queda reducida en la cantidad 8.200 rls. de vellón. Este es mi dictamen según mi conciencia y mi inteligencia que Dios se ha servido darme. Oñate, diciembre 23 de 1824. Manuel de Ligarte". Mateo Albeniz. Certifico yo el infrascrito maestro de capilla de música de la muy ilustre y muy leal ciudad de San Sebastián y organista en la parroquia de Santa María de dicha ciudad que, habiendo visto por orden de dn José Joaquín de Vicuña, las condiciones presentadas por el maestro organero Ligarte y el maestro Amezua para la composición del órgano de la N. y L. villa de Urnieta, digo que debe ser preferido el organero Ligarte por cuanto ofrece hacer dicha obra en mucha más equidad que Amezua, pero que lo que necesita este órgano es el remedio de los males que padece, y no de aumento de teclado ni nueva invención de fuelles, y que respecto a no tener que aumentar registros ni cosa alguna, debe rebajar unos mil reales o componerse con él a fin de sacar el mejor partido. Así lo siento en esta ciudad de San Sebastián, a febrero 5 de 1825. Mateo Albeniz. Postdata: Sería lo mejor que esta obra se hiciese a jornal y costaría menos, sin embargo de que el maestro organero lleva 30 rls diarios y el oficial a proporción, siempre saldría más barata, y que de todos modos ha de ser examinada por maestro inteligente y que el maestro ejecutor ha de responder de la obra en tiempo de dos años. Vale. Albeniz. 256 Musiker. 14, 2005, 239-256

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz