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EMMANUEL MOUNIER ANTE EL PENSAMIENTO CRISTIANO 53 En España el pensador Ramiro de Maeztu reflexiona igualmente sobr,e la crisis del humanismo 4 ' 7 . Tal vez la obra más representada de esta crítica sea la de Ni– colás Berdiaefif en la que anuncia una nueva edad media 48 . Mounier traspira la misma preocupación. La expresión «nouveau mayen áge» viene a su pluma en la línea de N. Berdiaeff. Tan en línea con él que en carta íntima le escribe en estos términos: «Maintenant que nous sommes peut-etre au début du 'Nouveau Moyen Age', si vous avez quelque chose a dire, faites-m',en part» !to. Reiteradamente, por otra parte, formula esta postura ideológica y práctica de su Manifest.e au s,ervice du personnalisme: «Nuestra meta lejana es la misma que nos asignamos en 1932: después de cuatro siglos de errores, debemos pa– cientemente, colectivamente, refaire la R.¡:naissance» "º. Hasta percibe en el campo más peculiar del pensamiento cristiano el movi– miento hacia una nueva teología. Discutida ésta durante algunos años, Mounier se anticipa a su triunfo al anotar que los Padres Daniélou y De Lubac lanzaban al público la colección, Sources chrétiennes, para poner en manos del gran público las obras de los Santos Padres, griegos y latinos, con el designio de empalmar con el pensamiento teológico tradicional en su estructura pretomist.a y volver a encontrar las riquezas espirituales de los primeros siglos cristianos, posterior– mente abandonadas, disminuidas o empobrecidas 51 • El lector debe advertir que la crítica de Mounier a nuestra edad moderna en crisis no es un embarque en el viejo navío de la crítica negativa y demoledora. Ya vimos en el primer apartado de nuestro estudio que no le falta dureza en análisis del desorden establecido. Lo mismo hay que anotar respecto de su visión de 1a historia de los tres últimos siglos. Baste decir que Mounier ha ,advertido la curva cerrada, abierta a la sima, que esta civilización ha tomado. Pero su insistencia en prospectar un nuevo orden, una nueva edad mi,edia, una nueva ciudad, un nuevo estado, una nuev.a {leología, habla muy alto de esfuerzo creador, proyectado hacia hitos que hay que conquistar. Son estos hitos, vistos en lonta– nanza, la mejor prueba de su insatisfacción ante el desarrollo de los últimos si– glos. Pero al mismo tiempo, el testimonio de su deseo de rectificar este desarrollo y de ponerlo en buen camino. Para comprender esta r,ectificación veamos cómo prospecta la marcha de la historia. b) Visión de l!11 m.archa de la historia Mounier centra su visión de la historia en torno a la idea de progreso. Puede ser éste histórico o individual. Pero se hallan ,estrechamente unidos. Aparecen y desaparecen coniuntamente 52 . 47 La crisis del humanismo, Buenos Aires 1947. 48 Una nueva edad media, trad. esp., Barcelona 1938. 40 Oeuvres ... vol. IV, p. 646. 50 Maní/este ... Oeuvres... vol. I, p. 488. 51 Feu la Chr... Oeuvres... vol. III, p. 682. 52 Le petite peur... Oeuvres... vol. III, p. 397.