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l1ahl1t 1•11 •·I p111•hl1•cito dt> Jsnotú quien no la amara en su vida .v 1111 liuho qt1il'n no Ja llorara en su muerte. ·l. 1,:1 s1•g-111Hio hijo de este matrimonio cristiano y fe– lii, 1'111·• .,mm <aU~GORIO HERNANDEZ CISNEROS. '• ls110tú, l6 de octubre de 1864. Muchos habrán pensado, al visitar este pueblecito de las montañas de Trujillo, en el nacimiento de los Andes ve– nezolanos, que muy bien se le podía haber bautizado al pue– blecito, en vez del rumboso nombre de Libertad de Beti– joque, su nombre civil, o Isnotú, con el nombre diminuto y evocador de: Belén. Visto desde lejos, el panorama tiene la amabilidad de un nacimiento en diciembre. Sus casitas, como de juguete, sus prados, que semejan artificiales de colorido y poesía. Sus caminitos serpeantes y alegres, ::;u cielo tan azul y sus nubes tan blancas. En la ladera del monte, lo mismo que el pueblecito que se forma en el Belén de Navidad; con las casitas casi colgadas de las peñas. Y sobre todo, el ambiente patriarcal, sencillo y amable, de sus gentes. Si hubiera nacido allí el Niño Jesús, no le hubiera fal– tado alojamiento y una cunita blanda, ni palabras cariño– sas y menudas. Porque las gentes de Isnotú, como buenos trujillanos, son así. Encantadoras en su sencillez, primiti– vas en su hablar y cariñosas hasta el extremo. Se eleva a 850 metros sobre el nivel del Lago de Mara– caibo, que se columbra lejano desde la vertiente en los días, claros. Consta solamente de dos calles paralelas a lo largo del camino de Betijoque, capital del Distrito. Al norte, la quebrada del Lamedero; al sur, ·el cerro de Ponemesa; al este, la quebrada de Carambú, y al oeste la de Vichú. Sus primeros cimientos datan del siglo diez y siete, y su vida tranquila solamente una vez se ha visto alborotada, cuando en 1899, con el objeto de adueñarse de un parque que man– dara el Presidente Andrade para los Andes, se libró entre– "Godos" y "Amarillos" una lucha violenta que duró tres días, dejando en ruinas y diezmada la pequeña población. Sus productos principales son el café y la caña de azú– car; plátanos, cambures, maíz. . . Tiene dos pintorescas. -26-