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manas, remediándolas con Ios bellos dones de su ce– rebro, de su corazón o de su fortuna, cayó violenta y trágicamente, único modo que encontró la Muerte, que sin duda también lo amaba, para poder cumplir su triste misión de abatir a aquel modelo de justo, de sabio y de filántropo". (g) Aquella familia trujillana Hernández-Cisneros, que había educado a sus hijos en el mismo amor de Dios que había heredado de sus padres y sus abuelos, ya tenía un fruto maduro de aquella siembra de piedad y de amor. El Señor, desde las alturas, había cortado para sí la espiga más alta y más granada ( 0 ) 15.-EN TU REGAZO, SEÑOR, ESTA ALMA GRAN– DE, FLOR DE TUS JARDINES EN ESTA TU HEREDAD AMERICANA. POR ELLA SUBE HASTA TI NUESTRA LE– TANIA, EN LA QUE TE PEDIMOS, SEÑOR: LA PAZ EN NUESTRAS VIDAS ATORMEN– TADAS, LA CARIDAD EN NUESTRAS ALMAS SE– DIENTA~ DE AMOR, LA PROSPERIDAD PARA NUESTRA PATRIA,. TAN QUERIDA DE TI. POR LOS MERITOS DEL DR. JOSE GREGO– RIO HERNANDEZ, HERMANO NUESTRO, QUE CONTIGO VIVE POR LOS SIGLOS DE LOS SIGLOS. AMEN. (g) Lino Sutil.-"El Universal".-Caracas, 2 de julio de 1919, N~ 3.634. ( 0 ) Sabemos que está incoada otra Causa de Beatificación en la familia Hernández: es el Hermano Miguel Febres Cordero, de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, ecuatoriano, entron– cado con el Dr HERNANDEZ en los bisabuelos. (g). (g) Dr. J. M. Núñez Ponte. Estudio crítico-biográfico. Pág. 21 !J. -267-