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LOS CAPUCHINOS EN EL VlSO DEL MARQUÉS: UNA REVISIÓN HISTORIOGRÁFICA. mentó directrices de tipo espiritual carente s de un sentido jurídico estricto, otros entendían que dicho testamento representaba la vuelta del propio Fran– cisco hacia los tiempos primigenios y, por tanto, leyeron el documento como un esfuerzo del santo por invalidar de alguna manera las disposiciones pontificias que permitían -desde su óptica- la corrupción de la Orden. Los silencios de los textos del santo irrumpieron en gritos de legitimidad pues "en el origen de toda reforma continúa siendo legítima la experiencia religiosa de Francisco que venía leída y releída en contextos diferentes y cambiando situaciones históricas, dando origen, de vez en cuando, a una autoconciencia diversa, que abría el camino a una diversa obliga– ción y a una presencia renovada del franciscanismo en la vida de la Iglesia y de la so– ciedad"". A pesa r de las diferencias interpretativas en cierto sentido sublimes, que cada una de las reformas franciscanas pregonaba frente a las otras ramas, gra– cias a las bulas papales, todas las ramas observantes se gobernaban por un vica– rio general de la observancia. Sin embargo, durante las primeras décadas del si– glo XVI la Orden de los Frailes Menores de san Francisco vio nace r la reforma más drástica dentro de la familia franciscana: el nacimiento de la Orden de Frai– les Menores Capuchinos (OFM. Cap.), bajo la figura de Mateo de Bascio . Est e personaje logró, hacia 1525, que Clemente V I I le concedies e la facultad de ves– tir con una túnica angosta y raída con capucho puntiagudo, de practicar la po– breza con el severo espíritu del santo fundador y de habitar en un lugar solita– rio donde pudiera "observar la Regla sin glosas que la mitiguen, y a predicar a los fie– les la palabra divina" 9 con la única condición de que "cada año, en el tiempo del ca– pítulo, debería presentarse al ministro provincial, para testimoniar que estaba sujeto a obediencia" 10 . Aunque no es el objetivo del presente trabajo la exposición sobre los mu – chos avatares que tuvieron los nuevos reformados para consolidarse como Or– den, hemos de apuntar que otras facciones franciscanas, principalmente la de los observantes, estuvieron, incluso hasta el siglo XVIII, en contra de la existencia capuchina. Específicamente los franciscanos observantes veían con la reforma capuchina el peligro de una nueva fractura dentro de la comunidad franciscana, que tanto trabajo había costado cohesionar, además de considerar a los nuevos frailes como un factor para la pérdida de su poder político, religioso y cultural dentro de la cristiandad. Por ello, el argumento de la observancia fue que ellos realizaciones individuales de sentido de lectura como la discusión de la interpretación. Con ello, ciertamente, se muestra su condicionamiento histórico; sin embargo, a su vez, éste brota del convencimiento alcanzado de que a la autosatisfacción de la interpretación del texto le ha llegado su hora final; la interpretación ya no prospera sin la reflexión sobre sus suposiciones e in– tereses" Ibidem, pp. 12-13. s ACCROCCA, F.: Francesco e le sue immagini. Momenti delta evoluzione delta conscienza storica deifrati minori, Padua, 1997. Citado por FELIPE ALONSO, R: "La identidad capuchina en los Anales de Zacarías Boverio (1524-1556)" , Naturaleza y gracia, 49 (2002) , p. 16. - CARROCERA, B. de: La Provincia de Frailes Menores Capuchinos de Castilla. Volumen I (1575-1701), Madrid, 1949, p. 2. 10 PENA GONZÁLEZ, M.A.: "Identidad del capuchino como hermano menor, a la luz de las Constituciones de 1990" , Naturaleza y gracia, 47 (2000) , p. 51. REVISTA C AM PO D E C A L A T R A VA N° 8 (2010 ) 73