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Academia Mexicana de Literatura Moderna - Sociedad Académica de Historiadores Editorial Sagitario 340 temer muchos de que el demonio les saque de su recogimiento como a este, para disponer, que poco a poco se pierdan.‖ 1082 XVI ―San Juan Clímaco [...] dize assi: Quando se toca la campana para llamar a los Monges a Maytines, se juntan los demonios, y unos se ponen al lado de nuestra cama quando despertamos, y nos incitan, a que reposemos un poquito, y persuaden a uno que es temprano. Esto que dize este Santo lo intentan, para que se quede dormido, y de todo punto dexe la obra, o si se levantan, la haga con negligencia, y con algunos pecados veniales.‖ 1083 XVII ―Un Monge, cuya voz era suavísima: este como en el Sabado Santo cantasse la bendición del Cirio Pascual, su Voz resonaba con gran melodia en los oídos de todos, y en esto el se glorió vanamente, y Dios castigo su vanagloria; porque allí fue arrebatado de los demonios, y nunca más apareció.‖ 1084 XVIII ―Un hombre muy poderoso dexó el mundo, y se entró Religioso; en los Conventos buscaba los lugares mas solitarios, y muchas vezes era sublimado a raptos, y levantado en el ayre, y como estuviesse una vez en Roma, y el Papa oyesse, que tenia esto arrobamientos, hizole llamar a su presencia, y le recibió con tanta devoción, y honra, que no quiso le besase el pie, sino que le abrazó, y sentó junto a sí, y habló con él muy de espacio con grande familiaridad. De esta honra se desvaneció, y glorió vanamente en su interior, y volviéndose, le encontró S. Juan Capistrano, y conociendo su cayda por inspiracion del Espiritu Santo, le dixo: Ibas Santo al Palacio, y buelves hecho demonio. Él desapareció esta reprehension, y presto cayó en diversos pecados, y murió en una carcel.‖ 1085 XIX ―Una muger muy devota era reputada por santa por muchos ayuno, vigilias, mortificaciones, oraciones, y obras virtuosas; cayó enferma, y murió, y luego se le apareció muy negra, y horrible, y dixo: Yo soy la infeliz reputada por santa, y soy entregada a los demonios, y a los tormentos eternos, por la complacencia vana, y sobervia, que tuve, juzgando, que ninguna se me igualaba; por lo qual sobre todos me ensoberbecí, y a todos los desprecié, y por esto fui arrojada alo profundo del infierno, de donde nunca podré salir. O que desdicha tan grande, por no aver vencido al vicio de la vanagloria!‖ 1086 XX ―En la vida de San Pacomio se refiere, que juntándose los Monges, para texer cestas, uno texió dos en el tiempo, que los otros una, según se les ordenaba. Puso las dos delante de todos, dando en esta a entender, que quería ser alabado por u industria, y solicitud, aunque no habló palabra: pero San Pacomio reconoció, que allí esta escondida la tentación del demonio, y suspirando, dixo a los otros: este infeliz ha trabajado en vano, y gran parte del dia ha rebentado [sic], por consagrar su obra al demonio, anteponiendo la honra mundana a la divina. Reprehendióle agriamente, y dióle por penitencia. Lo I. que las espuertas de los otros se las echasse sobre los ombros [sic], y que les pidiesse le encomendasen a Dios, y le perdonasse su pecado. Lo 2. que con las espuertas sobre los ombros entrasse al refrectorio. Lo 3. que por cinco meses estuviesse recluto, o encerrado en su celda, y no comiesse sino pan, y agua. Lo 4. que cada dia texiesse dos espuertas, y nadie le hablasse.‖ 1087 XXI ―Dize San Juan Clímaco que un Religioso, que tenia discreción, y ciencia para hablar bien me dixo: Estando yo en compañía de otros, vinieron a mi los demonios de la sobervia, y vanagloria, y uno me aconsejó que platicasse algo de la materia de la contemplacion, o refiriesse alguna obra biena, que huviesse hecho, estando en el yermo. Al qual como yo le despidiesse de mi, diziendo: Buélvanse azia atrás, tengan verguen a los que piensan mal contra mi. Luego el otro que estaba al otro lado, me dixo al oído: Alegrate, porque lo has 1082 Ibíd., p. 362 1083 Ibíd., pp. 362-363 1084 Ibíd., p. 385 1085 Ibíd. , p. 387 1086 Ídem. 1087 Ibíd., p. 388