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Academia Mexicana de Literatura Moderna - Sociedad Académica de Historiadores Editorial Sagitario 334 Leimos con cuydado las Addiciones del Libro intitulado: Falacias del demonio, y de los Vicios , su Autor el P. Fr. Felix de Alamin, Predicador Capuchino, y Misionero; y son muy conformes a su assumpto, y de grande utilidad para el aprovechamiento, pues acrecenta mucho la gran luz de su doctrina, como se reconoció en la brevedad que se acavó la impression en la primera vez que salió a la luz, y se imprimió. 1055 Este libro renovado, corregido y aumentado por mucho, consta de 628 páginas impresas a dos columnas. Carece de imágenes al igual que la primera edición y tiene algunos errores en la numeración de las páginas, en las citas escritas en latín y, producto del paso del tiempo, algunas palabras son ya ilegibles. A diferencia de las primeras Falacias, divididas en dos tomos y cuatro libros, esta edición está estructurada en ocho tratados, que a su vez se dividen en capítulos y meditaciones: 1. De las utilidades de la oracion y de quanto procura estorvar el demonio [24 capítulos] 2. Que propone las meditaciones de los novissimos, y del conocimiento propio puestos en practica [24 meditaciones] 3. De las meditaciones de la vida y Passion del Salvador [52 meditaciones] 4. Que trata de los impedimentos con que el demonio quita el fruto de la oracion y sus remedios [17 capítulos] 5. Que manifiesta las falacias de el Demonio, ú de los vicios que apartan del camino derecho del Cielo, y de la perfeccion [48 capítulos] 6. De los dichos de la lengua que apartan el camino derecho del Cielo y sus falacias [15 capítulos] 7. En que se proponen remedios generales para desarraigar los vicios, y conseguir las virtudes [14 capítulos] 8. De la consecucion o practica de las virtudes y su perfeccion [19 capítulos] La utilidad de las Falacias según su autor La obra, muy bien pensada dentro de la lógica de un demonio aterrador y acosador, está dedicada ―al Primer Ministro de Dios, Principe de los Angeles, Protector del Pueblo escogido de Dios SAN MIGUEL ARGANGEL‖ dado que fue este arcángel el elegido por Dios ―para defender la honra de Dios contra Lucifer y sus sequazes‖, 1056 y si bien Alamín sabe que sólo conociendo al enemigo se le vence, escribe: El fin de este libro es hacer guerra al demonio, y para vencerle, declarar algunos engaños suyos ocultos, con que rinde a las almas, es dar a conocer las armas, con que pelea, que son los siete vicios capitales, para que conocidos huyamos de ellos. Para todo esto hallaremos la victoria en nuestro glorioso San Miguel [...] que de dia y de noche no cessa de pelear contra el demonio. 1057 Hasta aquí, y después de cobijarse bajo la custodia de San Miguel Arcángel, Alamín nos va esbozando un demonio bastante dantesco que incluso teje redes en donde más trabajo le cuesta tentar pues escribe en la Introducción que En esta Ciudad todos hazen la voluntad del diablo, y assi uno basta para guardarla, como le dan gusto, no necessita de tentarlos, y assi este esta ocioso [...] En el monasterio todos resistían a las tentaciones, y por ello se juntó tan gran multitud de demonios para tentarlos [...] qué se debe executar por librarse de nuestro enemigo el demonio? No sabemos que es continua su guerra, que nunca cessa de cercar, y sitiar a nuestras almas? Si la Ciudad con ser muy fuerte, y adornada de Murallas, y Castillos [para enfrentar a los enemigos militares], con gran diligencia se guarda, quanta mas se debe poner para defender a las almas que no tienen Castillos, ni Murallas, ni otra defensa, sino nuestro cuydado? [Además] la ignorancia de los peligros es la causa de no evitarlos [...] Es que ay muchas enfermedades espirituales, ay muchas ocultas postemas de los vicios, y bien peligrosas, que no te advierte ni se reparan. Son dolencias ocultas, y buen nocivas, y como las almas las ignoran, de aqui proviene que aplican los remedios 1058 1055 ALAMIN, Felix, Falacias del demonio..., Madrid, en la imprenta de Blas Villanueva, 1714, s/n. 1056 F. de Alamín, Op Cit ., páginas de dedicatoria, s/n. 1057 Idem. 1058 Ibíd., Introduccion muy necessaria que declara la necessidad de la doctrina de este Libro, s/n.