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49 Dios para conseguir el dolor; si haces de tu parte lo que es menester para concebirlo; si te acusas con .sin– ceridad, sin excusas, para cubrir o disminuir la malicia; si eres de aquellos que tienen siempre un mismo relato por falta de examen, o de aplicación a enmendarte seriamente; si pasas semanas sin confesarte; cuáles son, en súma, tus confesiones... ¿Tienes tanta con– fianza en ellas, que sin hacer otra comparecerías ante .el. tribunal de Dios? Míralo bien; y atiende a velar sobre este punto, porque es esencialísimo. Generalmente examínate lo quinto 1 si concedes el tiempo debido a las cosas espirituales; si antepones. a esto los demás empleos, como son el estudio, trabajo corporal, etc... Y acuérdate. de que esto es expresa– mente contra la intención de nuestro Padre san Fqm– cisco; si tienes complacencia en las cosas de las cuales resulta Dios glorificado; y disgusto de sus ofensas; si tienes vergüenza .de parecer espiritual; si vives con delicadeza de conciencia, o con abusiva libertad come– tiendo toda suerte de pecados veniales y contentándote con evitar solamente los mortales. Reconoce tus faltas, singularmente l.os malos hábitos, y escoge los medios más adecuados para corregirte. PRACTICA De sentimientos. Para el primer día. (Habiendo venido a mis manos algunos pensamientos anotados por un religioso durante sus ejercicios, los pongo cada día como ejemplo. Pero no deben escribirse cosas de conciencia que pertenecen a la confesión. 4