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-24- VI , _.EN~.....................- ..... B I_c_o..... , _y__¡ Y. .. .. I ...... t1__ os_c___ oM_O. HEBMA~QS PQBFH;S, Invocaci6n inicial ••• MONICION: "La pobreza sin la fe es un contrasentido¡ dentro del Evangelio se convierte en don". (tomás Larrañaga). Todos hablamos hoy de la pobreza. Pero todos nos sentimos, en mayor o menor medida, incómodos ante esta realidad. Sin embargo, en una revisión sincera de nues– tra identidad franciscano-capuchina, no pode– mos olvidar esta nota esencial de nues·tra vi– da. Francisco nos la recomend6 1ntimamente al final de su vida: "Que, en señal del recuerdo de mi bendici6n y de mi testamento, ••• amen - siempre a nuestra señora la santa pobreza y - la guarden" (Testamento de Siena). A pesar de la incomodidad que sentimos ante el tema, te– nemos la obligación de meditar, de reflexio-– nar, de orar sobre la pobreza "que para noso– tros es peculiar camino de salvaci6n 11 (2,3). Damos grac·ias a Dios por este don y le pedi-– mos que nos d~ fuerza para testimoniar nues-– tra vida de pobreza e~ medio de los -hombres. Himno .•• Salmos .•• LECTURAS: Fl 2,6ss. "Cristo, a pesar de su condición divina, no hizo alarde de su categoría de Dios, al contrario, se despojó de su rango, y tomó la condición de esclavo, pasando por uno - de tantos. Y así, actuando como un hombre cualquiera, se rebaj6 hasta someterse in--