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nadie ha podido ver todavía (15). Unos días después. las niñas decían al P. Ramón Mª Andreu. que ''habían visto a su hermano junto a ellas, de rodillas, con unas gotas de sudor brillándole en la frente, y que la Virgen le miraba, le miraba..., y que parecía estar diciéndole: Dentro de muy poco estarás a mi lado". Todo esto ocurría alrededor de las 10 de la noche. El P. Luis volvió en sí y le costó incorporarse a su m.undo exterior; pero las niñas siguieron metidas en su éxtasis y emprendieron el descenso de. los Pinos a un ritmo tal. que le hicieron decir al P. Royo Marín: "Parece como si tuvieran alas .en los pies". Todo acabó en la iglesia. Y naturalmente empeza– ron en seguida los comentarios... El que mús efecto hizo fue seguramente éste del P. Royo Marín: "Yo no soy infalible; pero si algo entendido en estas cuestiones, y me parece que las visiones de las niñas so11 verdad. He podido apreciar cuatro .señales a favor, que me parece no dejan lugar a dudas". El P. Luis no estaba para hablar mucho. Pero cuando los de su grupo los que habían llegado por la mañana procedentes de Aguilar de Campoo-- se fue– ron congregando en Cossío para regresar a sus casas aquella misma noche, él le aseguró al cura D. Valentín: "Don Valentín, lo que dicen las niñas ES VERDAD; pero usted no airee por ahí todavía esto que yo le digo.,.; la Iglesia tiene que usar de mucha prudencia en estos asuntos". 60