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días la volvió a soltar y regresó con una ramita verde en su pico. Esperó aún otros siete días. Soltó la paloma por tercera vez y la paloma no volvió más. Entonces salió .Noé del arca y todos cuantos en ella estaban. Noé erigió un altar de piedra a Dios y ofreció un sacrificio. Después del sa– crificio, Dios establece un pacto, una alianza con Noé, alianza que al– canzará a toda la tierra. El autor sagrado pone en boca de Dios· estas palabras: Hago con vosotros un pacto. Ningún ser viviente será destrui– do por las aguas de un nuevo diluvio. Pongo mi arco en las nubes como señal de mi alianza. 3. Hijos de Noé. Tres hijos tenía Noé al salir del arca: Sem, Cam y Jafet. .De Carn se nos dice que era el padre de Canaán, supuesto ascendiente de los cana– neos, establecidos en Palestina y enemigos del pueblo de Israel. Noé se dedicó a la labranza. Plantó una viña. Al tiempo de hacer el vino, bebió de él abundantemente, se embriagó y quedó desnudo en la tienda. Cam, al verlo, se burló de él. Por el contrario, Sem y Jafet se compadecieron del estado de su padre y lo taparon. 4. Maldición de Canaán y bendición de Sem. (Gén. 9, 24-28) Al despertarse y conocer lo que había hecho Cam, Noé lo maldijo en. su hijo, con estas palabras: Maldito sea Canaán. Que se convierta en el siervo de los siervos de sus hermanos. !Por el contrario, la bendición cae especialmente sobre Sem, del que procedería el pueblo escogido, el pueblo de Israel, y de éste el Salvador del mundo. Por eso, aunque de manera muy impropia, podemos considerar esta bendición a Sem como una especie de profecía mesiánica, pues la razón de su bendición es, en último término, Jesucristo. El libro del Génesis, a partir del diluvio, se interesa principalmente por los descendientes de Sem, antepasados de los israelitas, que son un pueblo semita. La Biblia marca esta línea genealógica:. Seni ~ Arfaxad ~ Sela ..... Heber (¿Hebreos?) ~ Peleg _,¡. Reu _,¡. Seruj .-.. Najor .-.. Teraj ..... Abraham ..... Isaac ..... Jacob, llamado también Israel. A estos se les suele llamar patriarcas, porque se les considera cabe– zas, jefes de una gran frunilia, que comprendía padres, hijos, nietos... siervos y siervas oo gran número. Los muchos años que les atribuye la Biblia, sobre todo a los patriarcas de antes del diluvio, más que a la rea– lidad, responden a un sentido simbólico. o bien son efecto de la imagina• ción popular, que tiende a glorificar a los antepasados. 5. La Torre de Babel (Gén. 11, 1,9). Cuando los hombres llegaron a Senaar (Babilonia, en Mesopotamia), encontraron allí una gran llanura y se dijeron: Vamos a edificar una 26