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-El tercer día, dijo Dios: que todas las aguas que están bajo el cielo se reunan en un so!,o lugar y que aparezca lo seco. Así se hizo. A lo se– co lla.mó Dios tierra, y a la reunión de las aguas, mares. Y 'lnandó que la tierra se cubriera de plantas y de toda clase de árboles. -El cuarto día, mand6 Dios que lucieran en el firmamento el sol, la luna y las estrellas. -El quinto día, mandó Dios que los mares se poblaran ,de peces y los aires de aves. -El sexto día, mandó Dios que la tierra se llenara de toda clase de ani– males. Y así se hizo. Si te fijas un poco, notarás tú mismo que no se trata de una des– cripción científica, sino de una narración popular. La luz aparece crea– da el primer día, mientras que el sol, luna y estrellas son creados el día cuarto, y sabemos que nuestra luz proviene del sol. Lo mismo acaece con los árboles y plantas de la tierra, creados antes que el soL El Gé– nesis no es un texto de historia natural, sino un libro de historia sa– grada, en el que se nos enseñan verdades importantes para nuestra salvación-la creación, la felicidad del hombre antes del pecado, el pri– mer pecado, origen de todos los males, etc. -Y todo eso se describe con expresiones y formas populares. El hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios 16