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ORNAMENTOS Y COLORES LITURGICOS Hoy, los sacerdotes y ministros sagrados, cuando realizan muchas ac– ciones litúrgicas, deben usar vestidos especiales. A estos vestidos espe– ciales llamamos ornamentos litúrgicos. Durante los primeros siglos de la Iglesia no había vestiduras especiales. El vestido de cada día, lim– pio y ,decoroso, servía también .para las funciones litúrgicas. Más tarde, cuando por influjo de los pueblos gérmánicos, se cambió :i.a forma de vestir, la Iglesia siguió usando las antiguas vesüduras en los oficios li– túrgicos. Con todo, tambié11- estas vestiduras han sufrido modificaciones en el correr del tiempo. Tenemos dos clases de ornamentos: blancos y de color. t. Ornamentos blancos. Amito (9): Paño blanco, de forma cuadrada, que colocado primero sobre la cabeza, se deja después caer sobre los hombros y la espalda. Se le da un sentido simbólico: casco de protección contra los enemigos es– pirituales. Alba (1) : Túnica larga, que llega hasta los pies. Se sujeta con un cíngulo a la cintura. Simboliza la pureza y santidad que -han de brillar en la vida del sacerdote y de los otros ministros sagrados. Cíngulo (7): Cordón con que se ciñe el alba a la cintura. Recuerda la castidad y continencia. Roquete: Una especie de alba corta, con mangas estrechas y largas. Si tiene mangas anchas y cortas se llama sóbrepelliz. Con todo, corrien– temente no se distinguen. 2. Ornamentos de color. Casulla (2): ( =casa pequeña): Primitivamente era una especie de capa que envolvía todo el cuerpo, con una abertura en la parte superior para meter la· cabeza. Más tarde, para mayor comodidad, se la fue re- 152