BCCCAP00000000000000000000936

\ Dio también orden de que se devolviesen al Templo los vasos de oro y plata, robados por Nabucodonosor. Muy pronto se formaron grandes caravanas de cautivos judíos que regresaban a su añorada Palestina. No sabemos exactamente cuántos fueron los que regresaron. Bastantes se quedaron en Babilonia, pues habían logrado establecerse bien. Retorno de los cautivos judíos 11. Jerm'laién l. La reconstrucción del templo. La nueva comunidad judía de Palestina, bajo la dirección de Zoroba– bel, tenía ante sí una tarea muy difícil: reconstruir todo lo que estaba en ruinas: ciudades, casas, muros y, sobre todo, el Templo santo de Dios. La reconstrucción del Templo fue su preocupación principal. Pero tropezaron con muchísimas dificultades. Por una parte, carencia de medios económicos y de personal suficiente, por otra parte, encontraron mucha oposición en los pueblos vecinos y especialmente en los samari– tanos. Todo se fue superando. En la empresa colaboraran todos los ju– díos, los de Palestina y los que habían quedado en Babilonia. Estos en– viaban dinero. Y así, después de algunos años, el Templo estaba recons– truido, aunque no con la riqueza y esplendor del Templo levantado por Salomón 3. Dos profetas: Ageo y Za.carias. Hubo momentos de verdadero desánimo y a punto estuvieron de abandonar la tarea empezada. Dios les siguió enviando sus profetas. que animaron al pueblo en sus trabajos y sufrimientos. De dos que vi-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz