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56 ESTRELLAS EN EL CIELO que te pidiera? Nada se pierde con ir... se trata de mi curación ... Dsi-1-Nun, al oír estas palabras, quedó pensativo. Se trataba de la salud de la hija a quien amaba con delirio· y no podía cerrar los oídos a tan imperiosa recomendación. --Concedido-le dijo-. Vete eligiendo el cortejo que te. ha de acompañar y yo mandaré extender las cartas que has de presentar al rey de Castilla para que te deje pasar por sus dominios. Llegó el día suspirado. Un sol abrasador calcina– ba las llanuras castellanas... La hija del rey de Toledo era recibida con todos los honores en todas las ciudades y pueblos por donde pasaba. Al cabo de varios días de camino llegaron a tierras de Burgos, capital en aquel entonces de Castilla. En la corte del rey castellano. fué recibida Casilda con su acompañamiento. -Venimos en busca de una laguna maravillosa que cura todas las enferm:edades--dijo uno de la co– mitiva. -En efecto-dijo el rey-. No lejos de aquí, cerca del pueblo de Bureba, se encuentra esa laguna que de– cís. Se llama de San Vicente. Casílda dijo a sus acompañantes que la dejasen sola y que ellos volviesen a Toledo a dar cuenta a su pa– dre de cómo había llegado felizmente a aquellas tierras de cristianos. Mientras los acompañantes de Casilda