BCCCAP00000000000000000000913

V U N día Jonás salió de su querida Betsa:ida para estable– cerse en Cafarnaún, donde su fama de buen pesca– dor le había abierto mi gran mercado, Sencillo, como todos los galileos, se presentó en su nue– va residencia sin más títulos que su honradez y su trabajo. No tardó en ganarse el afecto de todos los cafarnaítas, que vieron en él un excelente amigo y un fiel p:rÓveedor. Acostumbrado al rudo trabajo del ma1·, se abrió ])aso inmediatamente y muy pronto compró ü.na casa ce:rca del puerto y en ella estáhleció el neg?cio, que creció corno la espuma. El joven Simón era fuerte y osado, y Jonás veía con orgullo que la profecía de su mujer iba a resultar cierta. Su hijo eí·a, en verdad, un excelente pescador. Conocía el lago palmo a palmo, y más de una vez se demostró sn carácter enérgico y arriesgado. Jonás se sentía orgull'oso de tal hijo, y en Cafarnaün no tai·dó la gente joven en fijarse en aquel fornido man– cebo que, aipenas salía el sol, estaba por las calles prego– nando su mercancía. Pero sohre todo era conocido Simón por su gnm fer– vor religioso. Diríase que lo había heredado de su glorio– so homónimo Simón Macabeo. Era im,petuo. 0 o en todas sus