BCCCAP00000000000000000000913
XXXl .Y L banquete que Nerón iba. a dar aquel día !prometía L ser de los más suntuosos. Las mujeres más bellas de · Roma y los hombres más distinguidos del Imperio no ,dejarían de asistir. Pero, sobre todo, sobresaldrían por su ri: queza deslumbradora Nerón y su mujer Popea. El lugar destinado al banquete era de lo más suntuoso ·que se puede soñar. Desde el vestíbulo, rodeado de gran– des galerías, se :veía el gran salón con su l:iosque de colum– nas de mármol de Numidia, iluminado por cientos de lám– paras de bronce. Sobre el arco que servía de portada esta– 'ha pintada en un cuadro de extrañas proporciones la ale~ górica cuadriga de Lissipo, lle:vando a las hermosas deid3:- 1des Diana .y Apolo. Era al atardecer. El sol, al herir con sus rayos pálidos las columnas de mármol, ponía en ellas un tinte de_ melancolía que las ha– da más fatídicamente brillantes. Los invitados pasaron ro– :mndo con sus vestidos de seda y 1púrpura las :marmóreas ,estatuas de los dioses y de los héroes... En lugar destacado del salón se :veía la estatua gigantesca de Hércules con la temible Hidra entre sus robustos brazos. A los lados, Mer– curio,. de cabeza y pies alados; Venus, de provocativa her– mosura; Saturno, terminando de engullir el último de sus 10
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz