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Repasando la historia de la piedad madrileña, vemos que estas aspiraciones poéticas han sido una realidad vivida. Desde esta su Iglesia, Jesús ha estado "llamando, recibiendo y consolando". Niños, jóvenes, señores, ancianos..., han pasado ante esta Imagen. Han dejado en su pie sus besos. En esos besos ha quedado lo que se pide y lo que se espera, lo que se ama y lo que se agradece. También han dejado infinidad de notas a sus plantas. A través de ellas se ve una gran fe, una confianza total, una conversión sincera, una gratitud inmensa... 3. UNTITULO El día 1 de septiembre de 1973 era firmado en Roma un Breve Pontificio, concediendo el título de "Basílica menor" a la iglesia de Jesús de Medinaceli de Madrid. ¿Por qué este título? Pablo VI, al conceder esa categoría a nuestra iglesia, exalta, confirma y, en cierto modo, consagra la devoción popu– lar a esta santa y venerada Imagen. 4. UN COMPROMISO Hay un aforismo latino que dice que "el nombre es un augurio, un presagio, un compromiso". Esta distinción de la Santa Sede para el templo de Medinaceli debiera engendrar un compromiso en todos los devotos de Jesús. Ese título nos pide que valoricemos y demos profundidad y hon– dura a esta devoción tan afectiva y cordial. Ojalá sea un nuevo paso para confirmar, subrayar y acrisolar los valores auténticamente religiosos y espirituales de nuestra devoción, haciendo que brote una primavera prometedora de cristianismo pro– fundo en torno a esta Imagen inquietante del Señor. 123