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fueron .envueltos en el delirio homicida. Apenas si ,el convento de Trinitarios es– ta1ba restaurado de ,los ,daños qu.e 1 le cau– sara la artillería francesa, cuando fué de nuevo pasto de las llamas. ¡ Y también la iglesia ,de J esíis se salvó esta vez de su destrucción! La ,duquesa de Denia, más tarde, qui– so convertir en s'Olares la vasta superficie que ocupaban el palacio y los jardines. ,de Medinaceli. En _el derribo .se encon– traban incluídas tres iglesias acogida-s a su .patronato :.la de San Antonio del Pra– do, que f ué de los Pa,dres Capuchi'nos ;. la ·antigua ,de iTrinitarios; y la de Jesús, que ocupaba el centro de la extensa p}a... 11icie y era la que más e-storbaba a los planes de J,a· ,duquesa. Desaparecidas .las -anteriormente cita-– das, ,la de J_esús fué la que logró salvarse gracias a- la intervención ,de un niño, fu– turo duque, que pidió a su abuela que no derribaran la igle-sia de 'Jesús. ¿Ac::iso no es basta11te esta. lista ,de pruebas para comprobar que Jesús Na: zareno ha efogido .como deÍl:ni'tiva Lt mo- 63