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que tiene Riobranco; el médico nunca quiso hacer noche en poblado por miedo al paludismo y también porque le detenían mucho.· Al día siguiente pasamos la línea ecuatorial a Rionegro. Este río tiene las aguas negras como el Caroní. El Río– branco las tiene rojas en invierno, claras y cristalinas en verano. Es, quizás, más caudaloso que el Orinoco, pero tiene el cauce mucho más hondo y con la misma variedad de peces que éste. Sus márgenes son inmensos bosques vírgenes, poseyendo toda la inmensa y feraz flora tropical. En la noche del Sábado de Ramos nos perdimos en una laguna, cuya entrada es ancha, pues, a pesar de rodearla y de andar más de tres horas, no encontramos la salida. Gracias a unos pescadores que nos obse– quiaron con fino pescado asado, pudimos salir pero no llegamos a Manaos sino a eso de las tres de la tarde. El río tiene una profundidad. en Manaos de 30 metros, por lo que los muelles son flotantes. En su puerto pueden anclar vapores de alto bordo y es de mucho movimiento, pues a unos kil6metros está el Amazonas y las Repúblicas de Colombia, Perú y Bolivia princi– palmente. Como llegué para Semana Santa, inmediatamente me metí en el confesonario y me fue facilísimo entender y hacerme entender, por lo que fui un auxiliar eficaz, según lo manifesta– ron los Padres y hasta el Obispo, un Franciscano muy piadoso. Los P.P. Capuchinos son los párrocos de la Parroquia de San Sebastián, que pertenece a la Misión .del Alto Solimoes, y que tienen jurisdicción en distintos poblados del Río Negro. Hice vida de comunidad y·me parecía que estaba en una de nuestras casas, pues tienen los mismos actos de comunidad que nosotros, con ligeras variantes, y casi el mismo método de trabajo. La Casa J.C.Araujo es la más poderosa y mejor organi– :ta.da del estado. Su jefe, un anciano de setenta años, D.José Gongaives Araujo, era una mentalidad superior; en la crisis de la Post Guerra y la desvalorii.ación de la goma principalmente, él, con talento financiero, salvQ su casa y el crédito del Estado, transformando varias industrias, creando otras, de manera que la renta del Estado Amazonas era de 7.000 contos de reis y el de sus industrias contribuía con más de 3.000, casi la mitad, pues el Estado tenía unos 500.000 habitantes y la ciudad de Manaos 100.000. Le decían el Rey de la goma y la hija mayor era religiosa clarisa. 92