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LOS INDIOS CRIMINALES Entre los indios, lo mismo que entre los civilizados, hay hombres criminales; unos por robar, otros por deshacerse de un rival, o porque no le dan. la mujer que quiere; y la inmensa mayoría de las veces, por venganza, se propone quitar a otro la vida. Mucho nos llamó la atención la fidelidad de los indios en el pago de las deudas; el factor tiempo apenas tiene para ellos importancia; lo esencial, lo importante, es la deuda. Si no la pueden cobrar o pagar y se ven en trance de muerte, comunican al hijo la deuda contraída; y, al reclamarla el hijo, aun cuando hayan pasado muchos años, la reconocen y la pagan. El año 29 nos vendió una mujer en Camarata una gallina que no pudimos pagar, porque la mujer se fue de viaje y no la habíamos vuelto a ver. En 1940 se me presentó un hijo de ella a reclamar el pago de la gallina; se la pagué en lo que habfamós convenido y se fue contento. En Luepa, en 1931, dejamos de dar a un indio una caja de f6sforos por no tener más a mano y en 1936 se presentó en Santa Elena a reclamar su caja. Claro que .en el viaje ·gastó, multiplicado, el precio de la caja, pero eso no importa: lo importante es el pago de la deuda. Pero mucha más importancia le dan a la venganza. El indio se pinta negros y horribles bigotes, la cara también de negro y figuras que causen impresión de horror en el cuerpo. Así pintado espera tranquilamente a la víctima dos días, diez, veinte... el tiempo que crea necesario para vengarse y hacer posible su revancha. El bosque, por donde pue<fu pasar la vícti– ma, es el lugar donde él encuentra más recursos. Provisto de tortas de cu.abe, de yesos y piedra para hacer fuego, de anzuelo y guaral, de arco, flechas y cerbatana, busca un lugar lejos del camino, se acomoda en un ranchito y, cerca del camino, espera a la víctima a la que ultima con la macana antes descrita.. A continuación, si tiene oportunidad, oculta tan cuidadosamente el cuerpo ·del delito que difícilmente se encuentra el cadáver, ni rastro de donde lo hubiera podido ocultar. , Había en la cumbre de la Pacaraima tres :ranchos de indios; siendo el pril:1cipal de ellos el de un joven de poco más de 30 años, estatura algo menos que la regular, fuerte y bien formado; de carácter dulce, trabajador y con una bonita familia. 74

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