BCCCAP00000000000000000000899

CARTA CLXIX, 24-25 JULIO 1920 59 con ardor creciente adueñarme de la vida infinita de mi Dios, en umon de mi Padre; y así continué hasta las 9, incluso durante el rezo de las Horas. Hace tiempo que los gemidos no se exteriorizan, así que padezco la ac– ción divina sin que se perciba ninguna, solamente me impide emitir la voz porque agota mis fuerzas, y pierdo algunos versículos y todo lo que recitan otras, porque me impide la atención al rezo. Con esta explicación suplo lo que omití anoche, esto es, que no sólo por las noches, sino que también de día con frecuencia experimento las imposiciones sobrenaturales que referí. 5.-Tamhién se ·me olvidó lo siguiente, Juntamente, o un momento des– pués que la presencia del Espíritu Santo se impuso a mi alma, aprendí tam– bién la presencia de la Santísima Virgen, un poquito más lejos que la ter– cera Persona de la Trinidad y entre sombras. Con ansia suma y empeño amoroso requerí a la Señora para que recogiera a V. R. en su Corazón san– tísimo y le comunique las virtudes y ardores y lo adapte para las inefables comunicaciones del divino Espíritu, y que no le suelte ni deje salir nunca de aquel Santuario, sino que allí se cumplan y consumen todos los misterios de amor y misericordia que el Espíritu Santo prepara para mi Padre y por su medio quiere cumplir en mi pobre alma; porque yo no puedo prescindir de la Señora .ni faltar a lo pactado, de que todas las gracias que Nuestro Señor quiere concederme pasen por el Corazón de mi Madre y Reina divi– na y los perciba a través de su vida y en su seno. Y, pues Nuestro Señor me ha establecido en la dirección y ésta me representa la vida espiritual que Dios inspira a mi Padre, o el fondo de su alma, justo es que V. R. se esta– blezca en el Corazón de mi Madre para que no tenga yo necesidad de aban– donarlo, si es posible. Así viviré contenta y ·la dirección será para mí la vida completa, porque percibiré las relaciones sobrenaturale.s a través de su alma, incluso la participación que me concede su vida, de su enjesusamiento la Reina y Madi,e de mi corazón, a la vez que dohle clausura que me sustraerá a toda influencia extraña y .me ocultará por c9mpleto a la mirada humana. 6.-A propósito de esto creo, Padre mío, que necesito que me dé un tirón eficaz que me aleje de todo comercio imprescindible con las criaturas. Por la misericordia de Dios, no tengo trato con las personas de fuera; son poquí– simas las cartas que he escrito durante su larga ausencia y casi siempre con pena y obligada por la necesidad o caridad, y a muchos me he negado por evitar compromisos. Sin .embargo, con frecuencia me distraen las criaturas, tispecialmente las religiosas; y es porque estoy demasiado aproximada y