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54 CORRESPONDENCIA DE LA M, ANGELES CON EL P. MARIANO nicaciones; y en seguida, tras breves momentos de reposo, empezó a salvar nuevas .distancias en aquel horizonte o tranquilo y divino océano, repitién– dose esto muchas veces y con perfección creciente. Esta mañana, en mis relaciones con el Eterno Padre, se ha repetido. Cosa parecida experimenté con relación al Espíritu Santo; y entendí que así como el Padre y el Verbo se pierden en la Procesión, así también V. R. con su hijita, e]J. qu:ien debe producir aquella fuerza de atracción que obli– ga al Verbo a referirse al Padre y hace que los dos se pierdan en la Proce– sión, consecuencia de la Generación, o sea en el Espíritu Santo. La Santísima Virgen se me impuso en el misterio de la divina Materni– dad, dispuesta a compartir con V. R. el poder que le comunica el Padre Eterno para producir o engendrar un Hijo Divino, y sus inefables comuni– caciones con el Espíritu de Amor, para que de humana me transforme en divina. Y también Jesús se impuso a mi alma como modelo y como Padre y Es– poso en forma divinísima, inexplicable, como Padre identificado con V. R., ansioso de comunicarme la vida, mejor dicho, de acrecentarla por medio de V. R., de penetrarme, comprenderme, informar mi vida, divinizarme, etc., etcétera. 5.-Y a antes, hace unos días, de 7 y media a 9 de la mañana, mientras oraba con intención de asistir espiritualmente al santo sacrificio que cele– braría V. R. aquel día, se impuso el Verbo Encarnado a mi alma en forma parecida, y experimenté efectos divinos, efusiones directas de su Divina Per– sona y del Espíritu Santo por los méritos de Jesús, y todo por medio de V. R., procurando yo, como era natural y debido, compartir con mi Padre las comunicaciones que recibía. Mi intención al ponerme en oración, fué continuar el trato con la tercera Persona de la Trinidad, que me había ocu– pado desde las 5, incluso en los momentos inmediatos a la sagrada comu– nión, que tuve que buscarlo en el corazón de mi Dios Humanado. Pero contra .mi intención se impuso Jesús a las 7 y media y tuve que correspon– derle. Dicho día hice intención de poner mi alma, potencias, todo lo que soy, en las hostias que consagrará V. R. durante su vida, y le pedí a mi Dios Humanado se apodere de mí y me asuma y asimile y me transforme en El cada vez que celebra V. R., y al recibir la comunión de V. R. penetraré en su alma juntamente con Jesús, para que sea cada vez más divino el lazo que me une a mi Padre, vivificador y santificador, y reciba con más plenitud la vida divina que Jesús quiere comunicarme por medio de V. R.